Máxima en la Argentina: una agenda maratónica centrada en la inclusión social a través del financiamiento

Maratónico. Ese fue el ritmo que la Reina de los Países Bajos, Máxima Zorreguieta , le imprimió a sus primeras 24 horas de visita oficial de dos días en la Argentina como "Asesora Especial del Secretario de las Naciones Unidas”, Ban Ki-moon. El viaje oficial, en el que Máxima no representa a la corona holandesa sino que lo hace en calidad de economista especialista en financiamiento, culminará mañana al mediodía cuando sea recibida en Olivos por el presidente Mauricio Macri .

La monarca, de 44 años, llegó anoche a Buenos Aires, se hospedó en el Hotel Duhau Park Hyatt y hoy, temprano por la mañana, comenzó con sus frenéticas reuniones y exposiciones sobre una temática que hace años ocupa su agenda: la promoción del financiamiento inclusivo y los microcréditos como formas de desarrollo para sectores postergados.

Glamorosa, siempre sonriente, Máxima lució un vestido cerrado de falda evasé animal print en tonos acqua, que acompañó con cartera Channel negra y zapatos Louboutin al tono. La apretada agenda impidió cambios de vestuario para una monarca que es también un ícono de la moda, con su estilo personalísimo: elegante y decontracteé.

En el piso 11 de la Torre Esmeralda, sede de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Zorreguieta tuvo una primera reunión con el coordinador residente de la ONU, René Mauricio Valdéz, y enseguida participó como principal oradora de la mesa “Desafíos para fortalecer y expandir la inclusión financiera en Argentina”, que moderó el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger. La escuchaban Carlos Melconián, presidente del Banco Nación, el fundador de Dinero Mail, Alex Oxenford, junto a directivos de empresas privadas de servicios financieros que debatieron sobre cómo expandir el financiamiento en núcleos de primeros emprendedores.

Casi dos horas más tarde, la esposa del rey Guillermo Alejandro, coronada en 2013, se trasladó a la sede del Palacio San Martin, donde mantuvo una reunión—primero a solas— con la Canciller Susana Malcorra, que luego se abrió a otros miembros del servicio exterior.

Desde hace tiempo que la reina consorte mantiene una excelente relación con Malcorra a raíz de los vínculos de ambas con las Naciones Unidas.

De regreso en la sede local de PNUD, Máxima se reunió a solas con la vicepresidenta Gabriela Michetti, y a continuación la plana mayor del gobierno escuchó con atención su estrategia para desarrollar y facilitar a nivel nacional el acceso al crédito a sectores de bajos recursos como herramienta de desarrollo.

Además de su rol en la ONU, Máxima se desempeña desde 2009 como presidenta honoraria de la Alianza Mundial para la Inclusión Financiera del G20 y como consejera de la Iniciativa sobre el Futuro del Sistema Financiero Global del Foro Económico Mundial.

De la ristra de reuniones, fue ésa la que se extendió por más tiempo. En un clima distendido y de debate, participaron Michetti, Sturzenegger, los ministros de Hacienda y Finanzas Públicas, Alfonso Prat-Gay; de Desarrollo Social, Carolina Stanley; de Producción, Francisco Cabrera; de Trabajo, Jorge Triaca; de Agricultura, Ricardo Buryaile; de Comunicaciones, Oscar Aguad, además del titular de la AFIP, Alberto Abad.

Sin siquiera una breve pausa para almorzar, el Mercedes Benz E400 de la flota oficial holandesa, trasladó a Zorreguieta a la sede de la Universidad Católica Argentina en Puerto Madero, la casa de estudios donde se recibió de economista en 1995 y donde años atrás brindó conferencias sobre su especialidad en financiamiento.

Allí, unos 350 alumnos, docentes, prensa e invitados especiales escucharon la disertación de Máxima, que sostiene que un mejor acceso a los servicios financieros puede contribuir a palear los índices de pobreza.