Sabina Frederic vuelve a sonar para reemplazar a Agustín Rossi, pero el Presidente posterga la definición

Aislado “por responsabilidad” en la quinta de Olivos, el presidente Alberto Fernández extendió al menos hasta el miércoles el misterio sobre el eventual reemplazo de Agustín Rossi, el exministro de Defensa que resistió la orden presidencial de bajar su postulación a senador por Santa Fe y no competir contra el binomio pactado por el propio Presidente con el gobernador Omar Perotti. El segundo cambio, derivado de la postulación de Daniel Arroyo a diputado nacional bonaerense, está prácticamente resuelto, con la inminente llegada al Ministerio de Desarrollo Social del intendente de Hurlingham, Juan Zabaleta.

“Lo va a decidir Alberto y lo más probable es que sea el miércoles”, contaron cerca del jefe de Estado, que sin menciones a los cambios de gabinete encabezó de manera virtual el relanzamiento del plan Ahora 12, con varios de sus ministros desde una planta en Cañuelas.

Mientras algunos de sus hombres de confianza reconocen el episodio como “un gol en contra” y un “tiro en el pie” del propio Frente de Todos, conviven en el Gobierno las dos posibilidades de las que se habla en los últimos días: o se busca un reemplazo fuera de la gestión, lo cual evitaría una reingeniería de buena parte del gabinete, o se escoge una figura endógena, como la actual ministra de Seguridad, Sabina Frederic, que asumiría ese cargo y dejaría, a su vez, un casillero vacío que debería llenarse con la misma velocidad.

“La ministra está dedicada a la gestión y a las políticas de su área de trabajo”, se atajaron cerca de Frederic, que este lunes encabezó en Paraná una reunión del Consejo de Seguridad, junto a los ministros del área de todas las provincias del país. De todos modos, desde el Gobierno reconocieron que el jueves pasado los rumores formaron parte de la reunión “prevista” por “temas de gestión” entre la ministra y el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, y recordaron que Frederic tuvo un extenso paso por ese mismo ministerio durante la gestión de Nilda Garré (2005-2010) como subsecretaria de Formación. “No es un campo que desconozca”, afirmaron fuentes oficiales sumando más misterio, aunque desde las Fuerzas Armadas dejaron trascender la incomodidad de los altos mandos con su eventual retorno, esta vez como ministra.

Otro de los nombres mencionados en los últimos días fue el del actual embajador en Brasil, Daniel Scioli, aunque cerca suyo lo descartaron. “El está ejerciendo la responsabilidad y la misión que le encargó el Presidente, mejorar la relación con Brasil todo lo que se pueda”, afirmaron desde la sede diplomática en Brasilia, mientras el embajador sostenía reuniones en la cancillería brasileña y el Ministerio de Infraestructura de ese país que comanda Tarcisio Gómes de Freitas. “Es una decisión difícil para Alberto. Y lo de Rossi no tiene vuelta atrás”, afirmaba un leal al Presidente, expectante en relación al nombre de la sucesión del virtual exministro.

Mientras la vacancia en Defensa, acelerada por la decisión presidencial de pedir la renuncia a todos los funcionarios que decidan ser candidatos, amenaza con involucrar a más miembros del gabinete, en Desarrollo Social las aguas están más calmas. Desde distintos estamentos dan por hecho que Arroyo se irá ni bien el Presidente confirme el nombre de su sucesor, y que Zabaleta será su reemplazo, aunque hay dudas sobre si Arroyo, cuyo objetivo central era justamente el sillón del ministerio que hoy ocupa, regresará efectivamente a la Cámara baja u ocupará un cargo en la Organización para la Alimentación y la Agricultura de Naciones Unidas (FAO), dirigida actualmente por el chino Qu Dongyu.

Si no se produce un brusco cambio de planes, Zabaleta llegará a un ministerio copado por las organizaciones sociales oficialistas (Movimiento Evita, Somos-Barrios de Pie, la CCC, el sector de Juan Grabois) nucleadas en la UTEP, quienes el sábado marcharán en forma conjunta en defensa del Gobierno.

El cierre de listas también dejó heridas en esos sectores. Grabois, por caso, habría quedado disconforme tras la no inclusión de varios de sus referentes en posiciones “entrables”, mientras desde el Frente de Todos intentaron tranquilizar a Daniel Menéndez, funcionario y referente de Somos Barrios de Pie, que finalmente ocupa el lugar número 16 en el listado de postulantes a diputados del oficialismo en la provincia de Buenos Aires.