Sin reelección en Buenos Aires: 97 conflictos en puerta
A partir del 10 de diciembre habrá 28 intendentes debutantes en la provincia de Buenos Aires, mientras que otros 10 retomarán el cargo que alguna vez ocuparon. Pero, con el correr del almanaque, la atención virará inevitablemente hacia los 97 intendentes que lograron la reelección y no podrán aspirar a un nuevo mandato en 2023, a partir de la ley que, en 2016, eliminó las reelecciones indefinidas y fijó un máximo de dos períodos consecutivos para los jefe comunales.
Dos caminos se abren en el horizonte de mediano plazo. El primero se dará si los intendentes deciden respetar la ley, lo que no demorará en generar escenas de darwinismo explícito en los municipios, que subirán en intensidad a partir de 2021. El segundo camino también operará a partir de ese año: si intentan dejar sin efecto la norma impulsada en su momento por el massismo y Cambiemos, los intendentes esperarán para golpear las puertas en la Legislatura o la Justicia. Así lo reconocen, sotto voce, tanto en el peronismo como en el oficialismo.
Es que el problema afecta a los dos espacios. De los 97 intendentes reelegidos, 43 son del Frente de Todos y 51, de Juntos por el Cambio. Entre ellos están también los más poderosos: salvo Fernando Espinoza (La Matanza), Juan Andreotti (San Fernando), Mayra Mendoza (Quilmes), Federico de Achával (Pilar) y Lucas Ghi (Morón), todos los intendentes del conurbano tienen la reelección vedada.
Difícil imaginar que todos accedan a un futuro legislativo o se integren a un gabinete provincial o nacional. De allí la presión que, inevitablemente, se ejercerá para modificar la ley.