Vialidad: el juicio a Cristina Kirchner estará abocado a cien testigos durante todo 2021 y se demoran los alegatos

El juicio por la causa conocida como Vialidad, por la que Cristina Kirchner comparte el banquillo de los acusados con el empresario Lázaro Báez y el exfuncionario Julio De Vido, entre otros, tendrá su última audiencia del año el próximo martes.

Del total de audiencias ocurridas este año, la mayoría estuvieron abocadas a las declaraciones de testigos pedidos por las defensas y los acusadores. En total, de los 184 testigos que fueron aceptados para declarar, 40 concretaron su presentación, mientras que otros 36 fueron desistidos –ya sea por las partes o por la fiscalía– y alrededor de cien lo harán en 2021. En el Tribunal Oral Federal 2, a cargo de este proceso, dan por descontado que todo el próximo año estará abocado a esas testimoniales y asumen que difícilmente se llegue a la etapa de los alegatos en el año electoral.

El juicio comenzó en mayo del año pasado. Cristina fue indagada en diciembre, pocos días antes de asumir la vicepresidencia, en una audiencia colmada de tensión. Luego el proceso se vio interrumpido por la pandemia y fue reanudado en agosto de manera remota, con dos audiencias semanales. Los jueces que intervienen son Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso y el fiscal es Diego Luciani.

Después de desistir de su oficina de litigios penales, la Oficina Anticorrupción cambió a los abogados que seguían de cerca este proceso. Esos abogados no acusarán y se retirarán del juicio una vez que se haya terminado de incorporar la prueba pedida por la OA. Seguirá como querellante la Unidad de Información Financiera (UIF).

En esta causa se investigan las presuntas irregularidades mediante las cuales se le concedieron a las empresas de Lázaro Báez, entre 2003 y 2015, unos 52 contratos de obras públicas viales en la provincia de Santa Cruz.

Este año declararon como testigos, además de los denunciantes, quienes fueron dueños de las empresas Gotti, Adelmo Biancalani, y Kank y Costilla, que fueron compradas por Báez y conformaron el Grupo Austral. También lo hicieron auditores de la Dirección de Vialidad Nacional y exfuncionarios de Santa Cruz.

Mientras las defensas de los acusados interpretan que muchas de las declaraciones testimoniales "derrumban la acusación" –así lo describió un letrado que interviene en el juicio a este medio–, algunos acusadores las consideran, en su mayoría, "valiosas". Los defensores, que en algunos casos comparten una estrategia conjunta, hacen hincapié en cuestionar las preguntas elaboradas por la fiscalía a los testigos.

Para la Justicia, el caso Vialidad es determinante por su influencia sobre el curso de otros expedientes contra la vicepresidenta. Por eso es un caso de altísima sensibilidad política en la Corte Suprema, donde hay seis recursos planteados por la defensa de Cristina Kirchner que, de ser tratados, podrían detener el curso del juicio o declararlo nulo.

Entre los testigos pedidos por Cristina se encuentra el presidente Alberto Fernández, quien podría ser citado a declarar durante el año que viene, por haber sido jefe de Gabinete durante uno de los períodos bajo investigación.