Durante la temprada de invierno se inauguró un proyecto inmobiliario que permite salir esquiando desde los departamentos
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A tres kilómetros por encima de la base del Cerro Chapelco, entre un bosque de lengas milenarias, enterradas en medio metro de nieve y con vista panorámica al lago Lacar con el volcán Lanín de fondo, la última temporada de invierno sumó un nuevo proyecto: un conjunto de 28 departamentos de lujo que fueron construidos bajo el concepto “cama-nieve”. Se trata del El Refugio Ski & Summer Lodge.
Enfocado en los fanáticos del esquí, el emprendimiento con el concepto de “salir directo a la pista”, es decir, que quien lo habita abre la puerta y puede salir esquiando. De hecho, el barrio Las Pendientes, donde se encuentran ubicadas las unidades, tiene dos pistas propias: una de 400 y otra de 750 metros de extensión, una de ellas que conecta directamente con el Cerro Chapelco.
“El proyecto fue jugado, se lanzó en medio de las crisis, pero gustó y le fue bien a pesar de la situación. La primera etapa se lanzó en 2019 y se vendieron volando, creo que salir esquiando del departamento no tiene precio. Volver y sacarse los esquíes en la puerta de tu casa tampoco. Las unidades se terminaron hace más de un año pero hasta ahora no se habían podido inaugurar por la pandemia de coronavirus”, resaltó Martín Boquete, director de Toribio Achával, que comercializa las unidades junto a la inmobiliaria local Finca Sur.

El emprendimiento de US$6 millones de inversión fue desarrollado por TAO, la misma empresa que hace 25 años construyó Las Pendientes. Se trata de una Villa de esquí in-out, con una superficie total de 98 hectáreas en 178 parcelas de 2500 a 10.000 metros cuadrados.
“Tenemos un macrolote donde decidimos hacer El Refugio porque nos dimos cuenta que faltaba un producto de alta gama. Así que hicimos un conjunto de 44 departamentos con todos los servicios para que el turismo o el inversor tenga una experiencia completa. Ahora estamos evaluando generar una tercera etapa donde vamos a poder capitalizar y seguir ampliando el Lodge original”, señaló Gustavo García Villanueva, arquitecto y desarrollador de la compañía, en diálogo con el diario LA NACION.
La primera etapa del proyecto contó con 28 unidades de 45 metros cuadrados que se vendieron completamente, mientras que la segunda etapa -prevista de inaugurar en diciembre de este año- sumará 16 unidades más y fue comercializada casi en su totalidad. El objetivo es desarrollar una tercera etapa más ambiciosa para el año que viene, en la cual se lanzarán 60 departamentos. También se prevé para finales de este año la apertura de un área de spa, piscina climatizada in/out, jacuzzi, sala de masajes, área de relax, vestuarios y gimnasio.
En cuanto a números, Boquete explica que sólo quedan dos unidades a un valor de venta que promedia los US$170.000. En ambos casos vienen ya amueblados y la forma de pago es de un anticipo del 40% y el saldo restante en 12 cuotas en pesos, ajustadas mensualmente por el índice CAC.

“Hasta ahora la experiencia es que las personas quieren usarlo y también ganar alguna renta. Todavía todo es muy nuevo, se incorporaron las primeras unidades al pool de alquileres hace unos meses y durante la temporada alta estuvieron 100 por ciento alquiladas”, explicó Boquete.
Las unidades se construyeron en ocho meses, ya que se utilizó la construcción en seco. Cuando empezó la nieve y la lluvia, se enfocaron en los interiores y en decorar los departamentos con un estilo nórdico. “La zona tiene una veda climática. Cuando comienza el mal clima no se puede seguir, tampoco dejan que suban los camiones de gran porte. Por eso ayudó el sistema de perfiles de aluminio, que permitió que las unidades se ensamblen muy rápido”, relató Daniela Aiello, de la inmobiliaria Fincas Sur.
Más allá de la propuesta inmobiliaria, también se inauguró el restaurante Terrazas del Refugio para que tanto huéspedes como locales y turistas puedan conocer la propuesta gastronómica, con productos regionales, elaborada por el chef Pablo Buzzo.

El negocio de alquilar el depto
Por su parte, aadesa Hotel Management se encarga de las operaciones del servicio turístico. Los dueños de los departamentos pueden adherir sus unidades al pool hotelero, con una rentabilidad estimada en los US$9000 anuales. Además, los inversores pueden hacer uso de la estancia por el tiempo que lo deseen, aunque eso se traduce en menos ganancias.
En la apertura de temporada de invierno , el resort ofrecía paquetes por siete noches de alojamiento, con desayuno y pase de esquí para todos los días en las Vilas de montaña. El paquete turístico tenía un valor de $521.000, aunque tiene descuentos y promociones por pago en efectivo.
“Este año hubo mucha gente que no pudo viajar al exterior y que se quedó con las ganas de la temporada pasada, así que apostamos 100% al turismo local”, sostuvo Ximena Aretino, gerente general de aadesa Hotel Management.

Si bien en el invierno la actividad destacada es el esquí, durante el resto de las estaciones del año el proyecto busca fomentar otro tipo de deportes como las caminatas, bicicletas, andar en kayak y las cabalgatas.
“La pandemia nos ha permitido conectar con la Patagonia, un destino que siempre estaba presente en los argentinos, pero que ahora se revalorizó y nos permitió redescubrir nuestro país. Este es un producto de las cuatro estaciones. Tiene una parte muy buena en invierno por estar a 1450 metros sobre le nivel del mar, tenemos garantía de nieve; pero en verano, primavera y otoño también es espectacular para recorrer la naturaleza”, cerró García Villanueva.
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