Excarcelan al uruguayo Mario Vitette Sellanes que participó en robo del siglo
Había sido condenado 21 años y 6 meses por ser el "cerebro" de un robo en un banco de la zona norte del Gran Buenos Aires; será expulsado del país en las próximas horas; allí recuperará la libertad
El uruguayo Mario Vitette Sellanes, condenado a prisión por ser considerado el "cerebro" de un cinematográfico robo a un banco de capital español en 2006 en la Argentina, fue excarcelado hoy y será expulsado del país en las próximas horas, informaron fuentes judiciales.
El juez Marcelo Peluzzi, a cargo del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N 4, autorizó la expulsión a Vitette Sellanes al concederle el extrañamiento hacia Uruguay en virtud de lo dispuesto por la ley de Migraciones, informó el Centro de Información Judicial.
"Fue excarcelado", confirmó al canal C5N su abogado, Diego Storto, quien señaló que Vitette Sellanes fue trasladado desde la cárcel al puerto de Buenos Aires para ser llevado desde allí a su país de origen, donde recuperará la libertad.
"La resolución implica que tiene expresamente prohibido regresar a la Argentina", añadió Storto.
Según la legislación migratoria argentina, pueden acogerse a la expulsión aquellos extranjeros que han cumplido la mitad de sus condenas.
En un juicio abreviado en el que confesó su participación en el robo y otros hurtos, el uruguayo fue condenado en agosto de 2010 a una pena unificada de 21 años y seis meses de prisión, pero ya cumplió más de la mitad del castigo ya que previamente había estado detenido por delitos anteriores.
Cómo fue el "robo del siglo"
El "robo del siglo", como lo llamó la prensa, ocurrió el 13 de enero de 2006, cuando cinco personas ingresaron en una sucursal del entonces Banco Río, propiedad del Grupo Santander, situada en la localidad bonaerense de Acassuso, a unos 15 kilómetros al norte de la capital argentina.
Las cámaras de seguridad del banco registraron que los cinco hombres se cubrieron los rostros, sacaron sus armas y tomaron como rehenes a las 23 personas que se encontraban en la sede bancaria, entre empleados y clientes.
Mientras simulaban una negociación con la policía, los delincuentes saquearon 145 cajas de seguridad.
Siete horas después, un grupo especializado de la Policía irrumpió en el banco, pero sólo encontró a los rehenes, armas de juguete, bombas falsas y una nota que decía: "En barrio de ricachones, sin armas ni rencores. Es sólo plata y no amores".
Los delincuentes huyeron por un túnel que acababa en un desagüe, desde donde posteriormente abandonaron el lugar en una camioneta.
Al tratarse de cajas de seguridad, cuyo contenido es confidencial, nunca se supo con precisión el monto del botín, pero la prensa calculó entonces que ascendió a unos 8 millones de dólares y decenas de kilos de joyas.
El plan funcionó a la perfección hasta que una mujer despechada, esposa de uno de los delincuentes, delató a la banda y dio a la policía innumerables pistas que, sumadas a errores de los ladrones, llevaron a los fiscales a acusar a los cinco responsables del atraco.
Los cuatro restantes fueron condenados a penas de entre 10 y 15 años de prisión.
Durante el último tramo de su detención, Vitette Sellanes se dedicó a componer canciones que, dijo, incluirá en un disco cuando recupere su libertad.
Agencia EFE