Uno de los hijos del kiosquero asesinado dijo que su familia analiza cerrar el local en La Matanza
El joven, de 25 años, dijo que tanto su abuelo como su mamá no quieren que vuelvan a abrir el negocio porque tienen miedo
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LA NACION
La familia de Roberto Sabo, el kiosquero asesinado de cuatro balazos durante un asalto en La Matanza, está evaluando qué va a pasar con el negocio donde ocurrió el homicidio. Tanto el padre de la víctima como la madre de sus hijos no quieren que sean los jóvenes los que continúen llevando adelante el local.
Uno de los hijos del kiosquero, Nicolás de 25 años, que trabajó junto a su padre durante algunos meses en el local ubicado sobre Avenida de Mayo al 800, dijo este martes: “Gracias a eso comíamos. Gracias a mi viejo que estaba siempre ahí. Y ahora el pedido de mi abuelo, tanto como de mi mamá, es que no se abra”.
Y agregó: “Estamos en veremos, cómo haremos y qué haremos. Se agradece mucho a la gente que nos mandó la colecta, la plata y todo eso. Nos da un parche para pensar tranquilos -entre comillas- qué haremos”, contó en diálogo con TN.
“Está en mente hacer otra cosa. Ahora por lo pronto estamos todos pensando en voz alta: ‘Lo cerramos, bancamos que se termine el contrato, vendemos el fondo, vendemos la mercadería y lo cerramos’. Es como que no tenemos nada claro”, continuó.
Nicolás dijo que sus abuelos tienen miedo. “Los entiendo al 100%, les sacaron un hijo y les pueden sacar un nieto tranquilamente”, cerró el joven.
Tras el impacto que generó el caso, usuarios de Twitter iniciaron una colecta para enviarle dinero a la familia de la víctima y juntaron más de $2.000.000.
El caso de Roberto Saco
El asesinato de Roberto Sabo originó una reacción popular en Ramos Mejía, partido de La Matanza, con movilizaciones y protestas por la falta de soluciones a la crisis de inseguridad. De 48 años y padre de dos varones, a Sabo lo mataron el domingo pasado de tres disparos, cerca de las 14, en su drugstore “Pato”, situado en la avenida de Mayo y Alvarado.
Por el crimen está detenido Leandro Suárez, de 30 años, que fue indagado por los delitos de homicidio criminis causae, robo calificado, hurto de vehículo, portación ilegal de arma de fuego de uso civil agravados por la participación de un menor (en este caso una adolescente de 15 años que fue su cómplice).
Tras dispararle a Sabo, Suárez y la menor que iba con él escaparon en un Ford Focus negro que poco antes habían robado a un remisero que se encontraba por la zona. Durante el intento de escape, los dos delincuentes que iban en el auto chocaron contra un árbol en Saavedra y Alvear, tras lo cual ingresaron en un supermercado. Simulaban que iban a comprar, pero en realidad buscaban cambiarse la ropa para no ser reconocidos. Así quedó registrado en un video de seguridad.
Desde allí, ambos huyeron en una moto robada a un repartidor, aunque fueron alcanzados por personal de la comisaría 2a. de Ramos Mejía en avenida de Mayo y Rivadavia. Suárez había sido liberado el año pasado tras pasar seis años preso por una condena en un caso de robo.
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