Confirmaron el procesamiento de Vicky Xipolitakis y los dos pilotos por el vuelo de Austral

La Cámara Federal porteña confirmó el procesamiento de Victoria Xipolitakis por poner en peligro una aeronave en un vuelo de Austral con destino a la ciudad de Rosario.

La Sala Primera de la Cámara también confirmó los procesamientos de los pilotos Matías Soaje y Federico Zocchi, y los embargos para los tres imputados por 250 mil pesos.

Los tres permanecerán en libertad a la espera del juicio oral y público.

El 22 de junio pasado trascendió un video que mostraba a la joven en la cabina del avión conversando y filmando junto a los pilotos.

En noviembre, el juez federal Sergio Torres procesó a Xipolitakis y a los pilotos de Austral en la causa por atentado contra la seguridad de aeronaves.

El magistrado consideró que Xipolitakis puso "en peligro la seguridad del vuelo" con su presencia en la cabina de mandos del avión. Además, embargó a cada uno de los involucrados por 250.000 pesos.

El delito de atentado contra la seguridad de aeronaves contempla una pena de 2 a 8 años de prisión.

En el fallo, el juez consideró oportuno "recomendar la restricción de las facultades del Comandante en cuanto a determinar la admisión de pasajeros en la cabina de mando, y de la tripulación en general, para habilitar la ubicación de pasajeros VIP en asientos que no corresponden a la clase de su boleto de embarque, lo que, claro está, en modo alguno se prevé en la normativa de la empresa".

Al conocer el procesamiento, Xipolitakis dijo que el tema no le da "felicidad". Y agregó que está a disposición de la Justicia. "Yo no hice nada malo", señaló, y responsabilizó a los pilotos por su presencia en la cabina.

Xipolitakis permaneció durante todo el vuelo, desde Aeroparque hacia Rosario, en la cabina junto a los pilotos y registró el viaje con su celular. El video luego se hizo público y se viralizó en las redes sociales.

En las imágenes se puede ver que la vedette accionó las palancas de mando y que los pilotos le señalaban cómo hacerlo.

La causa se inició por una denuncia penal del presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, que además despidió a los dos pilotos.