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Drama de una argentina por recuperar a sus hijos
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Parece una historia de película, pero es real. Gabriela Arias Uriburu, de 33 años, hija del ex embajador argentino en Guatemala Juan José Arias Uriburu, sabe que su esposo secuestró a sus tres hijos. Sabe también que viajaron a Jordania en un vuelo particular, pero ni ella, ni siquiera Interpol, lograron, hasta ahora, dar con el paradero de los pequeños.
El caso de Karin, Zahira y Sharif, casi calcado del que relata la película norteamericana "No me iré sin mi hija", sacudió a la sociedad guatemalteca, el lugar donde nacieron y residían los niños con sus padres.
Se trata de niños de cinco, tres y un año y medio, nacidos del matrimonio de Gabriela Arias Uriburu con Imad Shaban, empresario jordano radicado en ese país centroamericano.
Tanto el gobierno de ese país como el nacional, a través de la cancillería, tomaron decidida intervención.
El casamiento se efectuó en 1991, cuando el padre de la joven argentina se desempeñaba como embajador de nuestro país en Guatemala.
Por desavenencias conyugales, Shaban secuestró a los menores y hay indicios ciertos de que los sacó de Guatemala y los llevó a Jordania en un vuelo particular.
La justicia guatemalteca obró con celeridad. Un juez de familia ordenó la inmediata restitución de los menores a la madre. Sin embargo, su orden no pudo cumplirse porque el padre y los niños ya habían desaparecido.
Al respecto, fuentes consultadas explicaron a La Nación que las leyes jordanas otorgan la crianza de los hijos a la exclusiva responsabilidad de la madre hasta los nueve años.
Las autoridades migratorias de Guatemala tomaron cartas en el tema a raíz de que Shaban, por ser padre de hijos nacidos en ese país, había obtenido la ciudadanía.
El embajador argentino en Guatemala, Félix Córdoba Moyano, ha informado a la Cancillería sobre los detalles del caso y el hecho se radicó en la Dirección de la Mujer y la Familia, que hasta la reciente designación como embajadora en Bolivia estuvo a cargo de Zelmira Regazzoli.
Actualmente es titular de la dirección la señora de Felipe Solá, secretario de Ganadería y Pesca.
Al desaparecer Shaban de Guatemala, llegó de Jordania su hermano Karim, quien fue procesado por la Justicia por considerarlo copartícipe del delito de secuestro.
Un tío cómplice
El tío de los niños sufrió diez días de cárcel y ahora recuperó la libertad, pero pesa sobre él la prohibición de abandonar el país.
El ex embajador Arias Uriburu, padre de la joven madre de 33 años, interesó también sobre el caso al embajador de Jordania, residente en Chile, que es embajador concurrente en Guatemala y la Argentina.
El caso que conmueve a la sociedad guatemalteca tiene semejanza con el secuestro que realizó un iraní de una hija nacida de un matrimonio con una ciudadana norteamericana que hace unos años dio lugar a la película "No me iré sin mi hijo", cuyo libro autobiográfico escribió Betty Mahmmody y protagonizó en el cine Sally Field.
Orden de captura
En el caso que nos ocupa, además del secuestro de los tres menores, el padre levantó sus propiedades en Guatemala e hizo un traspaso de sus bienes, presuntamente fraudulento.
Además, Shaban secuestró los pasaportes argentinos de los niños, dado que por la nacionalidad de la madre ellos los tenían, y el pasaporte de ésta, para evitar acaso que los siguiese a Jordania.
Tanto el gobierno de Guatemala como el de la Argentina han dado intervención a la Interpol para la inmediata detención de Imad Shaban.
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