Garbellano: "Yo soy el protagonista del Oyargate"
1 minuto de lectura'
"Acá el protagonista soy yo. El protagonista exclusivo del Oyargate 98 soy yo", reclamó Luciano Garbellano, enfundado en la bata blanca de toalla en la que se adivina el logotipo del Sheraton Hotel.
Recibió a La Nación en su casa, un departamento de un ambiente agrandado con espejos, alfombrado de azul hasta en las paredes, donde se juntan una cama de dos plazas y media y un hidromasaje.
Sobre un escritorio de granito descansa una videograbadora y un televisor de 29 pulgadas, donde se ve un video. Allí aparece un hombre con las facciones del juez federal Norberto Oyarbide en la recepción de Spartacus, en el segundo piso del edificio de Agüero 1916, según explicó Garbellano.
El ex dueño de Spartacus, acaba de regresar de Tribunales, donde fue indagado por segunda vez. La primera no dijo mucho, pero en su nueva aparición, cuando estaba a punto de quedar detenido, prendió el ventilador en su estilo verborrágico y grandilocuente para acusar a Oyarbide.
-¿Por qué habla ahora y no antes?
-Porque ahora decidí colaborar con la Justicia y me muestro arrepentido (Se sonríe). En mi declaración dije que estaba arrepentido y que no voy a volver a poner un prostíbulo gay. Se terminó esa etapa.
-¿Por qué entregó ahora el video a la Justicia?
-Porque Oyarbide se hacía filmar por morbo propio. Yo acepto el proxenetismo que me endilgan, pero no lo de extorsionador. Si yo hubiese sido ladino o traidor, cuando Oyarbide procesa a Cavallo, yo hubiera ido con él o con su abogado Guillermo Francos. Hablemos de la verdad.
-¿Usted entregaba dinero a Oyarbide?
-Cada quince días, 15.000 dólares.
-¿En concepto de qué?
-De protección. Eran ganancias de Spartacus que yo las compartía con él. Oyarbide juntaba 60.000 dólares al mes entre todos los prostíbulos.
-¿También les cobraba por protección?
-Claro. Si tiene 800.000 dólares ahorrados.
-¿Cómo lo sabe? ¿El se lo dijo?
-No. Pero solamente yo, le di 420.000 en los últimos cuatro años. No había otro Spartacus de esta magnitud.
-¿Cuál era su relación como el comisario Norberto Rosa?
-Con él está todo bien. Nunca le di un peso.
-El dijo que usted era su informante...
-Pero si no decía eso, cómo iba a justificar las llamadas conmigo. A mí me lo presenta Oyarbide, pero el que recibía la plata, en realidad, era Armando Giffi, el ex comisario de la 19a.
-¿Pero en su declaración usted dice que Rosa le eliminaba la competencia?
-Yo nunca le di nada a Rosa. Si Oyarbide le daba plata es otra cosa. Yo le daba plata a Oyarbide y él arreglaba con Rosa. Así fue como ocurrió.
-¿Sabe de otros supuestos delitos que cometió Oyarbide?
-Sí, arregló una causa por una marca de un conocido bar con sucursales en todo el mundo. En la planta baja del prostíbulo recibió de un empresario 250.000 dólares para arreglar la causa.
-¿Quién cree que lo baleó?
-Yo pienso que el que me mandó matar es Oyarbide, porque yo lo eché del prostíbulo. El me debe 118.600 pesos de los servicios que tomaban sus amigos. Porque yo a los chicos les tengo que pagar. Me decía: "Negrito, no le cobrés". Llevaba champagne y seis pibes a la habitación, pero los amigos de mis amigos no son mis amigos. El me desautorizaba, me desacreditaba pasando por encima mio y se llevaba a comer a los pibes.
-¿Sospecha de Rosa en el tiroteo?
-Puede ser, porque el trío es Rosa Oyarbide y Hernán Cattáneo, el que me entregó. Me llevaron a la muerte. Si me matan a mí o me meten preso se acabó la historia de Oyarbide. Yo soy el único protagonista.
- 1
2Casa Rocca: preocupa el deterioro de un emblemático edificio platense construido hace casi 100 años
3Frente a la Agencia I+D+i: “Le pedimos al niño Jesús insumos para investigar”, la llamativa protesta del sector científico
4Luna Park: la Cámara porteña confirmó la medida que prohíbe al gobierno de la ciudad avanzar con las obras de demolición


