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"Hablamos durante 2 años, me dice que le encanto y me pide fotos, ¿por qué nunca quiere verme?"
Estimada Consuelo,
Diez años de novia, ocho conviviendo, venía necesitando más de mi novio pero no me lo daba. Entré en una página para encontrar parejas. Hablé con varios, siempre aclarando que tenía pareja y sólo quería charlar. Encontré a un hombre que le pasaba lo mismo pero no me gustaba. Nos pasamos el teléfono. Me hablaba casi todos los días, menos cuando estaba con su novia. Se separa. Seguimos hablando. Me gusta. Quiero conocerlo. Por alguna razón él no quiere, siempre una razón diferente, excusas: la facultad, el trabajo, "no tengo plata", mil excusas. Lo encuentro por Facebook, Instagram, veo todo . Tenemos dos amigos en común, él no sabe. Me cuenta al año y medio de hablar que sale con una chica de vez en cuando. Me sigue hablando casi todos los días. Me dice que le encanto, le propongo vernos, me dice que sí pero después surge algo y nunca puede. Me pide fotos y videos, sólo quiere eso. Antes hablábamos mucho más, ahora no.
Cada vez me gusta más, me encanta. Dejaría cualquier cosa por verlo. Veo que en sus redes sociales agrega y saca chicas. Se puso de novio. Él lo desmiente. Le miento, le digo que me separé. No me habló más. ¿Que hago? ¿Por qué hablamos dos años y no quiso verme? ¿Por qué no me dice que está de novio y que yo ya no le intereso?
La amante virtual desconsolada (29)
Estimada amante virtual:
No lo digo yo, lo dice Jean-Paul Sartre: el infierno son los otros. Hay muchas formas de entender esa frase, pero una de las más útiles en la vida cotidiana es la idea de que el hecho de que los demás tengan deseos propios (casi siempre insondables) en lugar de actuar de forma transparente y en coincidencia perfecta con nuestros propios deseos es, bueno, infernal. A vos te encantaría que lo único que este muchacho quisiera fuera verte y salir con vos, pero él quiere otra cosa que no tiene nada que ver con eso: que le mandes videos y estés en vilo esperando sus respuestas para decepcionarte cada vez que cancela. Goza con eso, goza defraudando tus esperanzas. No hay mucho más que entender ni mucho más que pensar sobre eso: existe la gente que disfruta de usar a los demás.
Mi humilde consejo, entonces, es sacar el foco de este muchacho y ponerlo sobre tu propio deseo y tu propio goce: ¿qué te haría feliz? ¿Estar soltera y probar libremente distintas experiencias? ¿Estar en una relación abierta? ¿Separarte e intentar conocer a una persona y construir una relación más satisfactoria que la que tenés? Las preguntas importantes son esas, no por qué tal o cual muchacho no quiere verte o disfruta de hacerte sufrir. En general creo que si una se engancha en una dinámica de este tipo, de permanente insatisfacción por tanto tiempo, es porque hay un deseo oculto que no te estás animando a asumir. Puede ser difícil pero seguro cuando te hagas cargo te vas a sentir mejor.
Fuerza,
Consuelo
Consuelo estará disponible para resolver todos los conflictos digitales que lleguen a la casilla modalesdebolsillo@lanacion.com.ar, como comentario a esta nota o a la cuenta de Facebook de LA NACION. Si la consulta es comprometedora, cuidará el anonimato del remitente.
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