Tormenta y vuelos demorados. Cientos de pasajeros varados en el inicio del fin de semana XXL
El éxodo turístico por el Carnaval se vio afectado en el aeroparque porteño por la tormenta eléctrica; generó largas esperas y malestar entre quienes tenían previsto volar a diversos destinos
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Las fuertes tormentas que comenzaron esta mañana en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) provocaron demoras y cancelaciones de vuelos en el Aeroparque Jorge Newbery, afectando la salida de miles de pasajeros en la víspera del inicio del fin de semana extralargo de Carnaval. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que las lluvias comenzaron alrededor de las 10.30 y continuarán a lo largo del día, con actividad eléctrica intermitente, lo que obligó a la activación de protocolos de seguridad en el aeropuerto.
Aeropuertos Argentina comunicó a LA NACIÓN que, debido a la tormenta, las operaciones en la plataforma de naves estuvieron interrumpidas por casi tres horas. Durante ese período, 17 vuelos quedaron en espera para ingresar a posiciones; 15 sufrieron demoras y cuatro fueron cancelados. En las pantallas de la terminal, los pasajeros encontraron avisos sobre posibles retrasos en la entrega de equipaje y anuncios de vuelos demorados en el sector de partidas.
El movimiento de viajeros ya era intenso desde esta mañana, cuando muchas personas comenzaron a trasladarse hacia sus destinos turísticos. La acumulación de pasajeros en el aeroparque porteño generó largas filas en los mostradores de las aerolíneas y en los sectores de embarque. La falta de información concreta sobre la reprogramación de los vuelos llevó a un clima de incertidumbre entre los viajeros.
Protocolo de seguridad
El protocolo de seguridad ante actividad convectiva se activó tras la detección de tormentas eléctricas en la zona. Este procedimiento internacional establece que, durante la presencia de actividad eléctrica en las inmediaciones del aeropuerto, el personal de rampa debe suspender sus tareas. Esto implica la interrupción de la carga y descarga de equipaje, el estacionamiento de aeronaves y la carga de combustible. Según explicaron fuentes aeroportuarias a este medio, esta medida se implementa en todos los aeropuertos del mundo ante condiciones meteorológicas adversas.
El sistema de detección de actividad eléctrica cuenta con un software que emite alertas en diferentes niveles: amarilla, naranja o roja, según la proximidad de la tormenta. Cuando se declara la alerta roja, el personal que trabaja en la plataforma debe abandonar sus tareas hasta que las condiciones sean seguras. “Hoy hubo alertas rojas por tormenta eléctrica. Cuando Meteorología emite esas alertas, el personal no puede estar en la plataforma por una cuestión de seguridad. Es una medida que se aplica en todos los aeropuertos”, explicaron fuentes del aeropuerto a LA NACIÓN.
Los pasajeros afectados expresaron su malestar por las demoras y la falta de precisiones sobre sus vuelos. Algunos servicios que ya habían aterrizado no pudieron desembarcar de inmediato. “Estuvimos arriba del avión esperando casi dos horas para bajar”, relató un pasajero a este medio. Otro viajero, Jorge Díaz, contó a LA NACIÓN que su vuelo pasó 15 minutos en el aire antes de poder aterrizar y luego estuvo una hora en espera para desembarcar. En algunos casos, se permitió abrir las puertas de las aeronaves para mejorar la ventilación, mientras que en otros se habilitó el descenso de manera escalonada.
En la terminal, las filas en los mostradores de atención se extendieron a lo largo del hall principal. Los pasajeros consultaban por la reprogramación de sus vuelos y manifestaban su preocupación por la posibilidad de perder conexiones. Muchos de ellos tenían previsto viajar hacia destinos turísticos en la víspera del fin de semana extralargo.
Las aerolíneas informaron que los vuelos demorados serían reprogramados en la medida en que las condiciones meteorológicas mejoraran. Sin embargo, la falta de previsibilidad sobre el desarrollo de la tormenta generó incertidumbre en los pasajeros, algunos de los cuales habían organizado sus viajes con anticipación.
El pronóstico del SMN indica que las precipitaciones continuarán en la región durante la noche y la madrugada, con la posibilidad de nuevas tormentas aisladas. Las aerolíneas recomendaron a los pasajeros mantenerse informados a través de los canales oficiales y verificar el estado de sus vuelos antes de dirigirse al aeropuerto.
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