Proponen reglamentar el uso de vehículos eléctricos en la provincia de Buenos Aires

Hace varios años, de manera tímida, los vehículos eléctricos empezaron a verse con más frecuencia por las calles de Buenos Aires en formato de bicicletas adaptadas, ciclomotores o pequeñas motos.

Personalmente hace más de 5 años que circulo de manera silenciosa y limpia en una moto eléctrica por la capital. El beneficio no ha sido solo económico y ambiental, si no que también mi moto ha estado exceptuada de pagar patente, no me veo obligado a utilizar casco (si bien obviamente lo uso), y ninguna ley de tránsito incluye a mi vehículo dentro de su campo de acción dado que estas motos todavía están homologadas como bicicletas en CABA al tener una velocidad máxima de 40 kilómetros por hora. Así como esto puede parecer bueno, también tiene la contra que uno no está asegurado en caso de accidente.

Hace pocos días tuve la oportunidad de leer el proyecto de ley de la diputada Rosío Antinor para la Provincia de Buenos Aires, el cual tiene como objetivo regular la circulación de los denominados rodados eléctricos, otorgar de infraestructura adecuada para fomentar el uso de este medio de transporte limpio y silencioso y promover la creación de líneas de crédito con el Banco de la Provincia de Buenos Aires, con bajos intereses y líneas de financiamiento para poder adquirir este tipo de vehículos.

Si recordamos, hace poco, cuando se comenzó a trazar la red de ciclovías en la Capital, el Banco Ciudad otorgó créditos de hasta 50 cuotas sin interés para la compra de bicicletas, el cual tuvo un éxito y adhesión insólitos. Hoy en día ya estamos acostumbrados a ver estos rodados a toda hora, estacionamientos preferenciales y hasta se recuperó el oficio de la bicicletería de barrio.

Volviendo al proyecto de la diputada Antinor, el mismo busca que se habilite y regule el patentamiento de los vehículos eléctricos, a la vez que se homologa la seguridad eléctrica y vial. También menciona que se deben crear puntos de recarga públicos y gratuitos alimentados con energías renovables.

Si bien, en casos como el mío, me voy a ver obligado a patentar mi moto, usar casco y llevar conmigo mi documentación personal y del vehículo, es un paso hacía la regularización de situaciones que estaban dentro de un bache legal, en donde tampoco podía asegurarme frente a posibles accidentes, por lo tanto, es un avance positivo para todos los que circulamos en este medio de transporte, y para todos aquellos que aún no se animan.

Crear líneas de crédito y financiamiento, fomentar el uso, proveer de estaciones de carga, proveer de cierta seguridad a la hora de circular y crear un registro provincial de vehículos eléctricos ya sienta el precedente que esta tendencia vino para quedarse, e incluso para en un futuro no muy lejano desplazar a la tan molesta, ruidosa y contaminante motocicleta convencional a base de combustibles fósiles.

Este proyecto de ley es un excelente comienzo para transitar lo que será la migración hacía el nuevo modelo de transporte que se necesita en las grandes ciudades. Hace poco pudo leerse que en varios países europeos se prohibirá la venta de autos a base de nafta y diesel. La era de las energías renovables ya comenzó y estamos siendo testigos, no solo de la modificación de la matriz energética, si no también de la modificación de hábitos, costumbres y marcos legales.

Rodrigo Herrera Vegas es co-fundador de Sustentator.com