La marca coreana presentó la nueva generación del Tucson, su SUV mediano; llega importado de Corea del Sur en dos versiones que se ofrecen desde US$53.900
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Tras muchos meses sin novedades (la última había sido el lanzamiento de la van Staria), la filial argentina de Hyundai comenzó a actualizar su gama y presentó la cuarta generación de su SUV para el segmento C, nada menos que el exitoso Tucson. Esta versión que llega a nuestro país es la misma que se comercializa actualmente a nivel global, e incluye ya el primer restyling que se introdujo en marzo de este año.
El Tucson se produce en dos polos, Corea del Sur y República Checa. Del primero salen los vehículos para Europa que se caracterizan por tener una distancia entre ejes menor, mientras que el de origen asiático, de mayores medidas, es el que se ofrece aquí.
Respecto de la anterior generación cambió sus medidas: creció 15 cm de largo (ahora mide 4,64 m), el ancho es de 1,86 m y el alto de 1,66 m. También aumentó la distancia entre ejes, ahora de 2,75mts, generando mejor habitabilidad interior y mayor estabilidad dinámica.
En cuanto al diseño, mantiene la esencia del lenguaje Parametric Dynamics de la marca, al tiempo que evoluciona con una estética más refinada. Así, en el frente presenta una interacción de líneas delgadas y angulares en la parrilla, complementadas con luces ocultas llamadas Parametric Jewel. En el lateral hay unos pliegues con aristas y en la parte posterior estrena luces y un nuevo planteo general.
El interior es realmente muy amplio y muestra una disposición más bien horizontal que crea una sensación de apertura ambiente. Está dominado por el gran tablero flotante con dos pantallas de 12,3 pulgadas cada una que se completa con la consola central tipo flotante. La habitabilidad se ha incrementado respecto a la generación anterior, especialmente en las plazas traseras gracias a la elección de la versión más larga que llega a nuestro país.
Y también incorpora mucha tecnología, como reconocimiento de perfil de conductor por huella digital, configuración automática de posiciones de volante, espejos, asiento, temperatura y multimedia, conexión para celular simultánea para 2 teléfonos, climatizador bizona con asientos calefaccionados y ventilados, apertura del baúl automática y eléctrica y regulaciones de los asientos delanteros también eléctricos.
En seguridad llega con un paquete de asistencias a la conducción (frenado autónomo de emergencia con asistencia en giro a la izquierda, mantenimiento de carril, control de velocidad crucero inteligente con Stop & Go, alerta de ocupantes traseros y monitoreo de presión de neumáticos, entre otros), que se suman a la de por sí completa lista de elementos pasivos y activos.
Hay dos opciones mecánicas: una es con el motor turbonaftero de 4 cilindros en línea, 16 válvulas y 1.6 L de cilindrada, que genera 180 CV a 5500 rpm y 27 kgm (265 Nm) de torque desde 1500 rpm, asociado a una caja de doble embrague y 7 marchas y tracción integral (AWD).
La otra lleva también un propulsor naftero de 4 cilindros, pero de 2.0 L, 156 CV a 6200 rpm y 19,6 kgm (192 Nm) a 5200 rpm, junto a una caja automática de 6 velocidades; la tracción en este caso es simple (delantera).
Los precios sugeridos al público son los siguientes: Safety 2.0, US$53.900, y Ultimate 1.6, US$65.900.