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La Matchless G50, otra vez en el podio
Ese modelo de 500 cc fue elegido Best of Show en Autoclásica 2012. Sobre esa motocicleta brilló Benedicto Chiche Caldarella entre 1961 y 1963
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PARA LA NACIONAgustín Lafforgue
Del 6 al 8 de octubre se desarrolló la 12ª edición de Autoclásica, un repaso al pasado con más de 900 ejemplares, muchos centenarios y preservados en su estado original. Los jardines del hipódromo de San Isidro volvieron a ser el escenario de esta muestra única en América del Sur, la cual es organizada por el Club de Automóviles Clásicos de la República Argentina y que está catalogada de interés turístico por el Ministerio de Turismo de la Nación.
Entre las distinguidas piezas estuvo la Matchless G50 1961 de 500 cc, moto que obtuvo el premio Best of Show tras la elección, que sigue las normativas de la Fédération Internationale des Véhicules Anciens (FIVA), del jurado de la muestra entre más de 300 motos. La unidad es propiedad de Arturo Scalise -y su hijo Claudio–, un reconocido amante de las dos ruedas, desde su época de piloto hasta su actual rol empresarial, donde se destaca la titularidad de JUKI Sacifia, y las presidencias de la Cámara Argentina de la Motocicleta (CAM), la Confederación Argentina de Motociclismo Deportivo (CAMoD) y la Cámara de Importadores y Distribuidores Oficiales de Automotores (Cidoa).
La Matchless G50 fue la ganadora del Gran Premio de la Argentina del Mundial de Motociclismo con Jorge Kissling en 1961 y con Benedicto Caldarella, el 14 de octubre del año siguiente, proeza que el pasado domingo se cumplieron 50 años. Precisamente, y a modo de anticipo, el carismático Chiche fue homenajeado por la organización al cumplirse medio siglo de aquel éxito y fue el encargado de hacer rugir el poderoso motor de la máquina inglesa. Luego de eso, Caldarella dialogó con la nacion y brindó los detalles de la verdadera moto de carrera.
"Fue una moto que al principio me dio dolores de cabeza porque tenía un defecto en un cárter y hasta que se encontró el inconveniente me dejó muchas veces de a pie en carreras que incluso venía ganando. Muchos decían que era porque yo la exigía demasiado, pero no era así, era un problema que tenía el vehículo y que al final don Pedro Balestrini me solucionó. Esto, además de ganar el Gran Premio de la Argentina en 1962, me permitió adjudicarme el campeonato Argentino y el Sudamericano en el 63. Después, lamentablemente en aquella época no nos podíamos quedar con la moto porque necesitábamos el dinero, se vendió. Hace un tiempo, Arturo y Claudio Scalise estaban tratando de conseguir una y por suerte lo lograron. Y la verdad que está impecable. No se le puede encontrar nada, diría que está como la que yo corría", relata Chiche con su habitual sonrisa en la ocasión mezclada con cierta nostalgia.
En cuanto a las prestaciones, el ex piloto de frescos 72 años manifiesta: "Yo corría con una Gilera Saturno de 500 cc que tenía 34 caballos. Y esta Matchless G50, de la misma cilindrada, estaba dotada de 50 caballos. La diferencia era muy fuerte. Recuerdo que de esta moto vinieron tres a correr al país; las trajo un venezolano de apellido Ipólito, y quedaron dos. Una fue la mía que la compró mi padre, pero para poder adquirirla tuvo que vender una camioneta". Además, y como la moto inglesa tenía fallas en los frenos delanteros, Caldarella revela que su padre, Salvador, le colocó los correspondientes a la Gilera y "ahí la moto mejoró muchísimo". Luego de reconocer que le gustaría volver a subirse a la Matchless G50 para "darle una vueltita en un circuito", para lo que conversará con Scalise, Caldarella, quien además de sobresalir en el motociclismo también lo hizo en el automovilismo donde fue subcampeón en la F2 Argentina, contó: "Era una verdadera moto de carrera y fue una de las primeras motos inglesas que no tuvo los resortes de válvula al aire, eran todo cerrado, por lo tanto no te ensuciabas con aceite cuando terminabas de correr. Siempre uno se baja limpito…"
