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Versión nacional de un éxito
El Focus que se produce en Pacheco ofrece niveles internacionales de calidad
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LA NACIONGabriel Tomich
Para expresarlo con rapidez: el Ford Focus nacional no tiene mucho que envidiarle al importado, que fue la punta de lanza de la nueva gama en nuestro país.
Esto quiere decir, concretamente, que salvo diferencias menores de terminación y adaptación a nuestros caminos y ciudades, el Focus CLX 1.8 fabricado en General Pacheco mantiene intactas las cualidades y características esenciales de la línea.
Mecánica. En este rubro, el Focus CLX cuenta con el Zetec de 1.8 litro, un motor que brinda prestaciones acordes (sin ser tan brillantes como las del 2.0 Ghia) para un automóvil que ahora apunta un poco más (también por el precio) a un segmento más familiar o de servicios (en especial, remiserías).
Su andar rutero y urbano es más que aceptable, con buenos registros de aceleración, recuperaciones y velocidad máxima. El consumo promedio también está dentro de lo que se espera de un propulsor de estas características.
Comportamiento dinámico. Una de las grandes virtudes del Focus importado es su estupendo comportamiento dinámico, incluso a alta velocidad.
Esto se mantiene prácticamente sin alteraciones en este CLX, más allá del mayor despeje que tiene para su adaptación a las ásperas calles y rutas de la Argentina.
El auto dobla con seguridad, es muy estable en línea recta y fácil de conducir, ítem en el que colabora decisivamente la excelente dirección que posee: muy precisa y con un radio de giro cerrado. Además, el confort de las suspensiones en ciudad no merece mayores reparos, por lo que conjuga un buen compromiso entre la comodidad y el comportamiento a velocidades superiores a los 150 km/h.
Seguridad. Cuenta de serie con ABS y doble airbag, lo que reporta un más que suficiente equipamiento de seguridad.
Eso sí, las distancias de frenado son un tanto largas a alta velocidad, lo que implica, en este sentido, conocer bien los límites del automóvil.
Confort y equipamiento. La posición de manejo y la habitabilidad en las plazas delanteras son óptimas. Por su diseño, el asiento trasero es estrecho, así como la profundidad del baúl. Lo mismo vale para la visibilidad por la luneta, limitada por las características de la línea.
La insonorización es más que aceptable, al igual que la sujeción de las butacas delanteras (uno de los puntos flojos del importado).
El Focus CLX, por otra parte, cuenta con elementos de confort como aire acondicionado, radio con CD-ROM y elevacristales eléctricos, entre otros.
Conclusión. El Ford Focus CLX nacional es un auto sobrio y con buen nivel de terminación. Esto, junto con su precio, lo hacen una buena alternativa en el segmento de los automóviles de menos de 22.000 pesos.
Prueba Ford Focus CLX
Presentación mundial: marzo de 1998.
Presentación en la Argentina: septiembre de 2000.
Lugar de producción: General Pacheco, Buenos Aires
Fabricante: Ford Argentina SA, 0800-888-3673
Precio: US$ 21.350
Garantía: 1 año sin límite de kilometraje
Por Gabriel Tomich
