VW Amarok CS, herramienta de trabajo

Probamos la versión de cabina simple de la pickup de Volkswagen; destinada a las aplicaciones laborales tiene motor turbodiésel de 140 CV y una amplia caja para cargar hasta 1,2 toneladas

18 de mayo de 2013
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Actualizado el 12 de julio de 2020

En la Argentina, las pickups son vehículos polivalentes. Se las utiliza para trabajar, pero también para el esparcimiento (viajes, vacaciones, turismo off-road, travesías), incluso con la familia.

La Volkswagen Amarok se forjó primero un prestigio entre este último grupo de usuarios, por tecnología, capacidad todoterreno, confort de marcha y seguridad. Ahora, a esta pickup que se fabrica en Gral. Pacheco le llegó el turno de competir más directamente en las aplicaciones laborales.

Para eso, Volkswagen lanzó la versión con cabina simple, que son verdaderas herramientas de trabajo. Por lo tanto entran en juego otras características importantes, más allá del confort y el espacio interior, como ocurre con las camionetas de cabina doble. Algunos de los atributos valorados en la cabina simple son, por ejemplo, la economía de combustible, una mayor simpleza mecánica, la capacidad de carga y de remolque, y el espacio de la caja, entre otros.

¿Cómo responde a esto la Amarok CS? Desde la parte mecánica, manteniendo el motor diésel 2.0 del resto de la gama, pero sobrealimentado por un solo turbo (es biturbo en las versiones de 180 CV), que le permite entregar una potencia máxima de 140 CV a 4000 rpm y un torque de 340 Nm (34,7 kgm) planos entre los 1600 y 2250 giros.

Este propulsor se combina con una caja manual de 6 marchas (muy bien relacionada para aprovechar el torque), logrando un conjunto que resulta muy ágil; en especial cuando el turbo acopla a unas 1800 vueltas, aproximadamente. Así, las cifras de aceleración y la elasticidad son muy buenas para el nivel de potencia y torque del motor, lo que no sólo beneficia para transportar hasta 1180 (versión 4x2) y 1050 (en la 4x4) kilogramos de carga útil y arrastrar 3 toneladas, sino también para moverse con soltura en la ruta, la ciudad, caminos de tierra y otras superficies fuera del asfalto.

Además, el consumo de combustible es muy contenido (ayuda mucho en esto la caja de 6 marchas), con registros de menos de 10 l/100 km en ciudad y apenas por arriba de 6 l/100 km en ruta a 90 km/h. Otra buena noticia es que, según los técnicos de Volkswagen, este motor puede funcionar sin problemas con gasoil grado 2 (1500 ppm de azufre); es decir, el más barato que hay en el mercado.

Como buena chata de trabajo, el confort de marcha no es el mismo que el de las Amarok más lujosas. Sin ser incómoda, esta cabina simple se nota más rústica y fuerte, en función de suspensiones traseras mucho más rígidas (clásico esquema de eje rígido y elásticos, más amortiguadores hidráulicos) que, en general, son bastante saltarinas en los desniveles cuando la caja de carga está vacía. Aunque esto es patrimonio de todas las pickups con este tipo de suspensión.

Sin embargo, esta Amarok CS no niega su origen y tiene, como sus hermanas más equipadas, una batería tecnológica que incluye frenos con ABS off-road más servofreno de emergencia (BAS) y distribución de la potencia de frenado (EDB), además de control de tracción (ASR) y bloqueo electrónico de diferencial. Sin olvidar el sistema de doble tracción 4Motion con comando electrónico (mediante una botonera junto a la palanca de cambios), que aporta gran capacidad de tracción aun en superficies con poco agarre.

Con estos elementos, la Amarok CS dobla muy bien y con un comportamiento muy franco en todo tipo de terreno.

Desde el punto de vista de la carga, esta Amarok, como se dijo, es capaz de soportar casi 1,2 toneladas en la amplia caja de carga, que es la más grande del segmento. Con una longitud de 2,205 m por 1,62 de ancho y 0,508 de alto, la caja de esta pickup tiene una superficie de 2,57 m2 y un volumen de 1,81 m3. Tiene espacio suficiente para cargar un pallet americano estándar.

En el interior, la posición de manejo es cómoda y la selectora un poco áspera, pero precisa. Sólo se comercializa con el nivel de equipamiento Startline, el más básico de la gama. Por eso, el confort se reduce al climatizador, el nuevo y buen equipo de audio presente en toda la gama Amarok (incluye radio AM

FM, CD/MP3, puerto USB, conectividad Bluetooth y iPod, tarjeta SD) y butacas regulables en altura. Los levantavidrios son manuales y los espejos laterales no tienen regulación interior, por lo que hay que bajar las ventanillas para ajustarlos a mano. No tiene airbags.

Con un precio de 198.920 pesos, esta Amarok CS 4x4 (la 4x2 cuesta $ 168.600) compite con la cabina simple Ford Ranger XL Safety 2.2 de 125 CV MT6 4x4 ($ 207.920), con la Toyota Hilux DX Pack 2.5 de 120 CV ($ 201.100) y con la Chevrolet S10 LS 4x4 de 180 CV (189.380 pesos).