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Carlos Bianchi, el entrenador más exitoso en la historia de Boca, inició hoy su segundo ciclo en el club de la Ribera, con el objetivo puesto tanto en el torneo Clausura como en la Copa Libertadores de América.
Sonriente y distendido, Bianchi dirigió el primer entrenamiento del año en Casa Amarilla y esta tarde viajará junto con los futbolistas y sus colaboradores a Tandil para comenzar la pretemporada de verano.
El ex conductor de Vélez y Roma, entre otros clubes, manifestó que "tenemos un grupo muy interesante como para tener presencia en los dos torneos", en alusión a la participación de su equipo en el Clausura y en la Copa Libertadores de América, y que "ahora, dependerá de si el grupo entiende bien mi mensaje".
Al pedírsele una comparación con su primera llegada a Boca, Bianchi pidió que "esas cosas no me pregunten. Me tendrían que haber preguntado si el país está mejor o peor, que eso es mucho más importante".
"El nivel futbolístico siempre es el mismo -conceptuó-, sabiendo muy bien que acá cada día que pasa las necesidades hacen que los jugadores se vayan mucho más jóvenes. Los equipos quizá no tienen tanta experiencia como tenían en el pasado, donde un jugador se podía pasar cinco, seis o siete años en un club. Que suceda hoy eso es bastante raro".
Señaló el entrenador que "nosotros trabajamos siempre igual. No creo que cambiar nos beneficie. Tenemos una idea de cómo es la preparación. Tal vez a alguno no les va a gustar, los que no nos conocen, y a algunos sí. Digamos que yo mañana a la tarde ya voy a hacer una hora y media de fútbol, como segundo día de entrenamiento".
"Son costumbres que tengo yo -añadió- y entonces tenemos que tratar de adecuarnos para llegar al nivel futbolístico que pretendemos lo más rápidamente posible".
Acerca de su regreso al club, comentó Bianchi, en conferencia de prensa brindada en Casa Amarilla a la finalización del entrenamiento matutino, que "me dio placer, pero no quiero imaginarme mucho más allá que el placer de volver a trabajar en Boca Juniors".
"No creo que sirva de algo recordar mucho el pasado en mi lugar -explicó-, porque me puedo llegar a confundir. Yo llego hoy con la cabeza bastante clara en que tengo que confirmar que Boca haya depositado su confianza en mí".
Según el director técnico, "lo que hemos hecho anteriormente no sirve de nada para mí. Yo sé cómo es el fútbol. En fútbol se vive el presente y tengo la costumbre de decir que de la e a la i hay una sola vocal. Del elogio al insulto".
"Por eso en mi cabeza yo tengo que no hemos logrado nada en Boca. A partir de ahora tenemos que trabajar para tratar de lograr algo de todo lo que dispute Boca Juniors", afirmó.
Sobre su preferencia por la oferta de la institución argentina por sobre otras que recibió, reveló Bianchi que "por empezar, me quería quedar en el país pero no pensaba que iba a volver a trabajar en Boca tan rápidamente".
"Las ofertas que he tenido del extranjero eran muy interesantes -confió-, sobre todo desde el punto de vista económico, pero no prevalecía eso. Prevalecían mucho más la familia, el país, los amigos... Todas esas cosas a las que a una cierta edad uno les da mucho más valor que a lo material. Entonces, a esta altura de mi vida preferí quedarme en la Argentina". Agregó que "lo que pasa es que las cosas que se presentaron eran a largo plazo: tres, cuatro, cinco años. No me imaginaba estar tan lejos de todas las cosas que cité anteriormente tanto tiempo".
Sobre los próximos pasos a dar, adelantó que "voy a ver cómo se compone el plantel, en dónde se encuentra mejor. Pero mi idea yo ya la estoy pensando, sabiendo muy bien que hay varios jugadores que están fuera del plantel en estos momentos, que se van a incorporar más tarde".
El director técnico, de 53 años, volvió al club después de un año en que el equipo fue dirigido por el uruguayo Oscar Tabárez y firmó un contrato por tres temporadas en las que cobrará 1,3 millones de dólares anuales.
En el banco xeneize, el "Virrey" ganó tres títulos locales (torneos Apertura´98, Clausura´99 y Apertura´00) y otros tantos internacionales (Copa Libertadores de 2000 y 2001 e Intercontinental de 2000).
La única incorporación que hizo Boca hasta el momento fue la del mediocampista Diego Cagna, el primer capitán de la era Bianchi, que quedó libre del club español Villarreal.
En la pretemporada el técnico no podrá contar con siete futbolistas, ya que cuatro han sido convocados para disputar una serie de partidos amistosos con la selección mayor y otros tres forman parte del equipo argentino que disputa el Campeonato Sudamericano sub 20 en Uruguay.
"Somos los que somos y estamos los que estamos", dijo hoy Bianchi tras una práctica que, según dijo, "ha sido liviana porque fue la primera y algunos jugadores estaban excedidos de peso, lo cual es lógico y muchas veces es bueno para el inicio de la pretemporada".
Además de destacar la permanencia en el club del delantero Marcelo Delgado, una de las principales figuras del equipo, anunció que el goleador Roberto Sosa, no viajará a Tandil.
De su exitoso ciclo anterior, Bianchi también contará con jugadores experimentados como Guillermo Barros Schelotto, Hugo Ibarra y Sebastián Battaglia, el arquero Roberto Abbondanzieri y los jóvenes Nicolás Burdisso, Clemente Rodríguez y Carlos Tévez.
A partir del 15 de enero próximo, Boca disputará distintos torneos de verano de los que participarán los otros "grandes" del fútbol argentino y en febrero afrontará tanto el torneo Clausura local como la Copa Libertadores.
En el torneo sudamericano, el equipo integra el Grupo 7 junto con Colo Colo (Chile), Barcelona (Ecuador) e Independiente de Medellín (Colombia).
Fuentes: DyN y EFE



