El Tour de Francia tiene un inesperado líder en la primera etapa
Geraint Thomas, que ganó la contrarreloj en Düsseldorf, se anotó como apoyo de Froome
"Me interesé por el ciclismo cuando tenía diez años, siguiendo el Tour. Verme aquí, delante de las cámaras con el maillot amarillo, es algo que no termino de creerme", admitió ayer el británico Geraint Thomas, minutos después de convertirse en el primer líder del Tour de Francia 2017, la prueba más importante del planeta en el mundo de las bicicletas. Lo suyo fue éxito en la contrarreloj de 14 kilómetros que se llevó a cabo en Düsseldorf, Alemania, y resultó el líder menos pensado en la jornada inaugural. El contexto le otorga más valor: la lluvia empapó el asfalto, provocó varias caídas, como la que causó el abandono del español Alejandro Valverde (sufrió dos fracturas en la pierna izquierda), y el galés sacó cinco segundos de ventaja sobre el pelotón.
Hasta hace unas semanas, este doble medallista olímpico nacido en Cardiff hace 31 años no tenía en sus planes participar de esta competencia. "Unos días después de mi abandono en el Giro de Italia decidí venir, para hacer lo mejor que pudiera. Intenté no ver el Giro por televisión (tras su golpe y abandono), me fui a Manchester para ver un fisioterapeuta y luego regresé a Mónaco. Monté en la bicicleta, entrené mucho y me vino la idea de venir al Tour", recordó quien era favorito a imponerse en la cita italiana y terminó decepcionado.
"Estaba en la mejor forma de mi vida, me había preparado muy bien. Pero el pasado es pasado. No voy a hacer especulaciones. Este comienzo en el Tour me motiva, pero el objetivo es apoyar a Chris (Froome), aunque con esta victoria voy a estar en lo alto de la clasificación general un poco más", sostuvo Thomas. Su compañero y líder del equipo Sky cruzó la meta en el sexto lugar, a 12 segundos.
Hoy, la segunda etapa, de 203,5km, unirá Düsseldorf con Lieja, en Bélgica.
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