Angelici: un frente de conflicto más que esta vez se le volvió en contra
Fama, dinero, poder: Daniel Angelici lo tiene todo. Amigo personal del presidente de la Nación, se lo considera un personaje influyente en la Argentina. Pero su proyección internacional solo podía proporcionársela el fútbol, y esa ambición encontró allí un escollo inesperado.
No es que no estuviera acostumbrado a los avatares de la suerte: lo torpedea cada tanto la doctora Elisa Carrió, que llegó a llevarlo ante la justicia; lo vapuleó en más de una ocasión Juan Román Riquelme, a cuya vuelta a Boca se opuso en su momento, aunque en los últimos tiempos las posiciones se acercaron; sus apariciones públicas en la Bombonera son esporádicas, preocupado por el eventual rechazo de los hinchas: en 2012 y con insultos lo empujaron a prescindir de Julio Falcioni, técnico campeón invicto; su relación con Rodolfo D’Onofrio se enfrió desde el episodio del gas pimienta y hoy solo se cruzan mensajes irónicos.
La entidad que produjo al “vicepresidente del mundo”, como gustaba autotitularse Julio Grondona uniendo su cargo de número 2 de la todopoderosa FIFA con la popularidad mundial del fútbol y el poder intrínseco que esa condición supone, tiene hoy un vice al que la reglamentación moderna le niega legitimidad fuera de las fronteras. La ola de transparencia post–FIFAgate podría explicar el cambio de actitud. Angelici alguna vez propulsó una Liga Sudamericana de Clubes, opuesta a los intereses de la Conmebol. Los resquemores de entonces podrían haber sobrevivido.
Más leídas de Fútbol
Terminó la primera. Así están las tablas de posiciones grupo por grupo de la Copa Libertadores 2024, tras la tercera fecha
Panoramas diferentes. Mundial de Clubes 2025: qué necesitan River y Boca para clasificarse
Palabra de DT. Qué dijo Diego Martinez tras la derrota de Boca ante Fortaleza en Brasil y sobre la situación de Valentini