San Lorenzo-Colón, Copa Diego Maradona: un penal de Oscar Romero sobre el final le dio el empate al Ciclón

Embarcado en su propósito de reinsertarse en la pelea por la punta de la Zona B de la Copa Diego Maradona, San Lorenzo había llegado al Nuevo Gasómetro sabedor de que, para eso, estaba obligado a vencer a Colón. Tomado como esencial ese objetivo, se fue de su casa con un mal negocio: empató 2-2 y el resultado dejó al Ciclón incómodo.

Se fue derrumbando el castillo azulgrana. El equipo de Mariano Soso, con la categoría y el desequilibrio que le otorga la dupla de los gemelos paraguayos Oscar y Ángel Romeo marcó diferencias en la primera fase. A eso se le había sumado una sólida defensa (apenas un gol en contra en ese lapso), aunque con una capacidad ofensiva muy limitada a lo concretado por la dupla guaraní. Y en la fecha anterior ante Talleres todo le salió mal, no gestó juego y se mostró dubitativo en defensa. En el tren de buscar soluciones, los regresos de Alejandro Donatti y Bruno Pittón trataron de aportarle una mayor seguridad en la última línea. Pero ayer poco le funcionó.

A lo largo de todo el partido, las ráfagas de viento fuerte en el Nuevo Gasómetro dificultaron el juego asociado. Así, entre las imposibilidades repartidas, las escasas ideas y un clima que alteraba todo, los dos fueron balanceando una imagen parecida. El empate reflejó con bastante fidelidad el reparto de méritos.

El 1-0 de San Lorenzo (Bruno Pittón)

En el arranque del partido, Colón reclamó un penal de Federico Gattoni que el árbitro Andrés Merlos no consideró. Cristian Bernardi entró como una tromba en el área local y el marcador central se lo llevó puesto. El conjunto sabalero -con razón- lo reclamó dentro y fuera del campo de juego. Lo cierto es que Merlos fue el protagonista de varios fallos insólitos y el club santafesino salió desfavorecido.

No obstante, fue San Lorenzo el equipo que mejores intenciones exhibió en la primera etapa. Al menos, fue el conjunto que más buscó con la pelota al piso, intentando generar un circuito agresivo ofensivamente a partir de la proyección de Víctor Salazar y Pittón, sus laterales.

Era el Ciclón el que se movía con mayor intensidad, con más ánimo de quebrar el cero. Y resultó precisamente Pittón, uno de los mejores exponentes azulgranas en el 2020, el que abrió el marcador a los 20 minutos. El zurdo (ex Unión, además) recibió un pase magistral de Ángel Romero y definió fuerte y cruzado (ya suma ocho tantos con la camiseta azulgrana).

La conquista no soltó demasiado a San Lorenzo, que desaprovechó algunas situaciones de contraataque. Parecía no tener la pimienta ofensiva de los compromisos iniciales en la Copa Diego Maradona. Del otro lado, Colón puso más hombres en campo adversario y se arrimó con combinaciones más cortas, aunque sin demasiada profundidad.

En el segundo tiempo San Lorenzo tuvo ráfagas en las que pudo aumentar la diferencia, aunque careció de efectividad. Franco Di Santo, aislado, no contó con ninguna situación de riesgo.

Así, con un rendimiento mejorado y con mayor presencia ofensiva tras la entrada de Wilson Morelo, Colón llegó al empate a los 25 minutos del segundo tiempo. El colombiano ensayó una gran maniobra personal y definió con firmeza ante Monetti. El juego, por entonces, era intenso y ninguno de los dos asomaba como dominador neto. La igualdad, hasta allí, no admitía demasiada discusión.

El 1-1 de Colón (Wilson Morelo)

Lo cierto es que a los 31, Alex Vigo enhebró una gran jugada por la derecha y Luis Miguel Rodríguez, con maestría, marcó un gol con su sello. A lo Pulga. La enganchó de derecha y la colocó en el ángulo izquierdo de Fernando Monetti.

El 2-1 de Colón (Pulga Rodríguez)

San Lorenzo quedó en una situación incómoda, a la expectativa de otros resultados, pero, fundamentalmente, a la espera de los ansiados festejos propios. Óscar Romero, de penal, le dio un empate que lo dejó con sabor a poco. Clasificó en la Zona 5 con condición de invicto, con tres victorias y tres empates, y fue considerado como un candidato a llegar a la final del certamen doméstico. Ahora, en una segunda ronda que otorga pocas licencias, el sueño de Boedo tiene signos de interrogación.

El 2-2 de San Lorenzo (Oscar Romero, de penal)