Triple Corona: La Natividad-La Dolfina ya se codea con grandes equipos que hicieron historia en el polo
Al enhebrar las conquistas de Hurlingham, Tortugas y Palermo, la fusión de los Cambiaso y los Castagnola arrolló en su año de estreno
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La Triple Corona es un título honorífico. Una distinción especial por sumar las copas obtenidas en los tres grandes abiertos de la temporada de primavera en la Argentina: la de Tortugas, la de Hurlingham y la de Palermo. No entrega un premio material, pero concede prestigio y, además, acrecienta la fama del equipo ganador. Hasta este domingo a la tarde, eran solamente cinco los clubes que agregaban esta intangible medalla en su palmarés. Y al caer el sol, con el triunfo de los Castagnola y los Cambiaso por 17-13 sobre Ellerstina-Indios Chapaleufú en la Catedral, se sumó La Natividad, asociado con La Dolfina, a la lista de supercampeones del polo.
Adolfo Cambiaso ya estaba en esa lista de ilustres acaparadores de temporadas, pero ahora lo acompañan su hijo, ‘Poroto’, y sus sobrinos, Camilo y Bartomé (h.) Castagnola. A los 20, 22 y 24 años, respectivamente, los tres jóvenes dejaron escritos en dorado sus nombres en los registros históricos del polo.
El mítico Coronel Suárez de Horacio y Alberto Pedro Heguy, y Juan Carlos (h.) y Alfredo Harriott fue el primero en conseguir semejante galardón. Corría el año 1972, tiempos en los cuales el certamen de Tortugas, que iniciaba la trilogía, no era tan considerado como los restantes, Hurlingham y el Argentino Abierto. Las cuatro leyendas repitieron el éxito colectivo en 1974, 1975 y 1977. La Triple Corona de los “coroneles” del ’75 acarreó un dato estadístico más: fue la primera ocasión en que el acaparador de los trofeos consiguió la hazaña con la máxima valorización. Suárez se quedó con Palermo también en 1976, pero un certamen inconcluso le impidió completar la tríada. Y el conjunto azul y rojo a rombos se tomó desquite en la temporada siguiente, con los mismos jinetes y aún ostentando 40 goles de handicap. Cuatro triplecoronaciones con una misma formación fueron un logro único, y por los tiempos que transcurren hoy, de constantes cambios en las formaciones (exitosas y no tanto), parece complicado que se repita algo así. Al menos en los próximos años.
El club La Dolfina, presente en el alto handicap desde el año 2000, alcanzó a Suárez en el número total con la conquista de ayer. Claro que la organización creada por Adolfo Cambiaso necesitó más años que Suárez y también distintas formaciones para acumular cuatro Triple Corona. La conquista inaugural tuvo lugar en 2013, y el conjunto reincidió en 2014 y repitió en 2015. Todo, con los mismos jugadores, que al igual que el equipo del suroeste bonaerense empezaron sumando 39 de handicap y luego alcanzaron los 40.
El salto numérico se produjo en 2014. Adolfito ya llevaba 20 años con 10 goles, y Pablo Mac Donough y Juan Martín Nero, varios. Quien subió su valorización ese año fue el uruguayo David Stirling. Juntos dieron forma a otro cuarteto mítico, para muchos, situado a la misma altura en la historia que el enorme Coronel Suárez.

La consagración de este año, ya con otro dream team en la cancha, completa el póquer. Una frutilla del postre para Cambiaso, que soñó este cuarteto compartido con Poroto y con ’Barto’ y Camilo Castagnola. Si bien Adolfito se sentía realizado al cristalizar su deseo de jugar en Palermo con ellos, íntimamente siempre apuntó a ganar todo, y lo consiguió. Esta Triple Corona es especial, por lo familiar y por lo 100% Cañuelas del equipo vencedor. ¿Habrán sido los últimos cartuchos del crack? Sólo él lo sabe. O ni siquiera él todavía; parece no tenerlo decidido.
En el tercer puesto del ranking, con dos conquistas de la Triple Corona, se ubica Ellerstina, cuyo estreno en el polo grande se registró en 1992, cuando Gonzalo Pieres le dio la oportunidad a un Adolfo Cambiaso de 17 años de comenzar a codearse con los mejores. En 1994 la Z ganó los tres abiertos, formando con Pieres, Cambiaso, Mariano Aguerre y el mexicano Carlos Gracida, vestidos de azul y blanco. El segundo triplete se dio 16 años más tarde, con la sucesión de Gonzalo y vestidos de negro. Aquella formación de 2010 estaba integrada por Facundo y Gonzalo (h.) Pieres, Pablo Mac Donough y Juan Martín Nero. Un elenco que terminó siendo de 40 goles; de seguir unidos, esos cuatro jugadores tal vez habrían cambiado la historia de los campeones y La Dolfina, archirrival de la Z, no habría sido tan exitoso. Pero los Pieres priorizaron la familia y como Nicolás venía pidiendo pista, el menor de los hermanos ingresó en el equipo y la sólida estructura se desarmó. No sólo eso: Mac Donough y Nero, tentados por Cambiaso, cruzaron de vereda y entonces nació la mejor versión de La Dolfina, que duró diez temporadas (2011-2020).

Con una consagración triple figuran La Natividad –fusionado con La Dolfina–, La Aguada y Santa Ana. La Natividad necesitó reunir a los hermanos Castagnola con el tío y el primo Cambiaso para concretar lo que en otras ocasiones se les escapó por poco. La Aguada, de Open Door, fue el primer equipo de cuatro hermanos en conseguir la Triple Corona. La consagración llegó en el año en que se decidieron a jugar todos juntos, el 2003: Javier, Eduardo, Miguel e Ignacio Novillo Astrada (y el suplente era Alejandro, el quinto hermano).
Y el gran Santa Ana, que en varias ocasiones resultó la piedra en el zapato de Coronel Suárez, hizo cartón lleno en 1973. Fue el único que se interpuso en lo que, en caso contrario, habría sido una sucesión impresionante de lauros de Suárez. Gastón y Francisco Dorignac, Héctor Merlos y Daniel González subieron a lo alto del podio en Tortugas, Hurlingham y Palermo, dos años después de la creación de la propia Triple Corona, y consiguieron la hazaña de ubicarse por encima de “la máquina de jugar al polo”. Suárez venía de alzarse diez años seguidos, de 1961 a 1970, con el Argentino Abierto, pero en 1971, para combatir contra los problemas de calendario que causaban las lluvias, se creó la Triple Corona uniendo los abiertos de Los Indios, al que representaron los Heguy en la negociación, y Tortugas, por quien estuvieron en las tratativas los Dorignac.

Una emblemática alineación que pudo pertenecer a este reducido grupo fue la de Indios Chapaleufú de los cuatro hermanos Heguy, que llegaron a sumar 40 goles. Pero Bautista, Gonzalo, Horacio (h.) y Marcos no daban tanta importancia a este título honorífico y generalmente se presentaban divididos en Los Indios-Tortugas: Horacito y Gonzalo, en Indios Chapaleufú III, y Bautista y Marcos, en Indios Chapaleufú IV.
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La Triple Corona no da una copa extra, pero entrega prestigio, hace a la historia. Agrega una pátina dorada a la fama de sus ganadores. Y éstos la retroalimentan esa reputación con sus nombres: Coronel Suárez, La Dolfina, Ellerstina, Santa Ana, La Cañada y La Natividad.
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