
Se hará desde el próximo ciclo triguero
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A partir de la próxima campaña triguera, la Asociación Argentina de Protección de las Obtenciones Vegetales (Arpov) coordinará el sistema de regalía extendida que nueve semilleros desarrollaron para preservar el valor tecnológico de la agricultura.
"El productor que decide sembrar con determinadas variedades reconoce como contraprestación la tecnología novedosa y adhiere al pago del nuevo sistema sólo sobre la base de lo que utilice para su siembra", explicó el presidente de Arpov, Adolfo Marull.
A diferencia de las campañas anteriores, la entidad será la encargada de cobrar las regalías a los productores que adhieran voluntariamente a esta modalidad sobre la base de la información aportada por cada empresa. "Rige un contrato de estricta confidencialidad", aclaró Marull a LA NACION.
El objetivo de los criaderos que forman Arpov es mantener el proceso de investigación en la industria semillera, que permite a la agricultura mejorar la productividad de los cultivos mediante una suba de los rendimientos.
El crecimiento de la semilla ilegal en trigo y soja, advierten los empresarios, está perjudicando las decisiones de inversión. A su vez, la inacción del Estado, verificada tras la desaparición del Instituto Nacional de Semillas (Inase), impide el control de quienes actúan al margen de la ley. Además, el abuso de la utilización de la semilla para uso propio, opinan, atenta contra el desarrollo de nuevos materiales.
"Quienes siembran semilla legal apuestan al sistema y al país, y así lo reconocen; quienes así no lo hacen no sólo son ilegales sino que apuestan al fracaso de un sistema productivo", opinó Marull.
La contraprestación, explicó el presidente de Arpov, funciona por un convenio de las partes. "Se establece para las nuevas variedades ofrecidas bajo este sistema y sobre cada nueva multiplicación que utilice durante la vigencia de la propiedad", añadió y destacó que "la contraprestación se reconoce sólo sobre las semillas sembradas".
Quién es quién
Cada empresa, en forma individual determina el valor de la regalía. Las compañías adheridas a Arpov que participan de este sistema son Buck, Klein, Lealsem, Don Mario Semillas, Monsanto, Nidera Semillas, Produsem, Relmó y Sygenta.
En trigo, Buck comercializa con regalía extendida las variedades Pingo, Mataco y Biguá; Klein, Escudo, Chajá, Delfin, Jabalí, Martillo y Sagitorio; Nidera Semillas, Baguette 10, Sur 5, 20, 21 y Premium 13; Produsem, Pro Inta, Gaucho y Molinero; Relmó, con INIA Tijereta, INIA Plus 14, LE 2249 (Churrinche) y Zorzal. El resto de las empresas ofrece diferentes variedades de soja. Se estima que el sistema de regalía extendida alcanza a un 20% de las variedades existentes, aunque este porcentaje crecerá en las próximas campañas con los nuevos materiales.
"La semilla, como primer eslabón de la cadena productiva, debe tener un liderazgo tecnológico, más aún en los países que no subsidian es mejor no imaginar lo que sucedería si no hubiera investigación", opina Marull.
El objetivo es lograr una mayor concientización de los productores respecto del valor agregado que puede añadir la investigación.
Informes: 4516-0070 o www.arpov.org.ar .
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