Claves para meterse en el mundo de las subastas y conseguir autos 30% más baratos
Los compradores habituales conocen a la perfección el procedimiento de los remates, pero, en el último tiempo, se han sumado nuevos interesados que tienen muchas dudas al respecto
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Desde gente que quiere cambiar su auto a pymes que buscan renovar su flota, los remates privados de vehículos ganan cada vez más adeptos por los precios que se pueden conseguir. Son hasta 30% más baratos que lo que puede salir comprarle a un particular y la rapidez de entrega de los rodados va de entre un mes y 60 días, aproximadamente, algo conveniente en comparación con las subastas judiciales.
“Lo más efectivo es privado contra privado porque la entrega no tarda más de 30 días. En general, las que venden son empresas medianas a grandes que una o dos veces al año renuevan la flota. El cliente, en tanto, se ahorra un 30% frente a lo que le costaría comprárselo a un particular y esto es para algunos un montón de plata. Pueden arreglarlo y revenderlo en 60 a 90 días y ganar un 15%”, explicó en diálogo con LA NACION Adrián Mercado, fundador y CEO del grupo Adrián Mercado.
En tanto, consultado por el público, dijo que hay desde personas que se arman una mini pyme comprando y vendiendo autos hasta empresas más chicas que renuevan su flota o usuarios directos particulares que aprovechan.
“Uno entra en una comunidad pensando que es algo engorroso, pero una vez que se está adentro resulta algo muy operativo y práctico. Se vuelve un vicio ver qué hay para subastar”, agregó.
En el caso de esta casa, los usuarios pueden ver los remates sin necesidad de pagar, pero si se busca ofertar hay que hacer un depósito. Por ejemplo, si se quiere ofertar por $1.500.000, la garantía es de $50.000.
En tanto, en Narvaezbid, el seguro de participación es de $40.000 por lote a ofertar. “Tenemos de todo: flotas de empresas como YPF, autos de las principales automotrices y vehículos de recupero prendario que se les ejecutan a los deudores y se venden por medio de financieras y bancos. Estos tienen poco uso y parten de una base de $30.000″, aseguró Federico Failace, gerente de Marketing.
Entre los modelos de prendarios hay todavía una Renault Duster 4x2, un Kwid, un Gol Trend y un Volkswagen Fox, entre otros. En la subasta de YPF, en tanto, hay más de 30 lotes compuestos de alguna Ford Ecosport o Ford Ranger. Por último, en el caso del remate de la automotriz General Motors, se pueden encontrar pick ups S10 e incluso hay una Chevrolet Spin a patentar.
“Actualmente, hay 200 vehículos publicados; todos reciben ofertas y cualquiera puede habilitarse”, completó.
Por último, Monasterio Tattersall anunció que el próximo 30 de septiembre subastará vehículos de alta gama y utilitarios de varias empresas por renovación de flota (Chevrolet Cobalt, Peugeot 408, Honda Civic, Toyota Hilux y Volkswagen Amarok, entre otros).
El procedimiento de compra tiene como único requisito ingresar y ofertar desde la plataforma con una previa habilitación.
Sobe el método de venta por subasta, el gerente del Área de Subastas de Activos de Monasterio Tattersall, Martín Ruiz, dijo que, en general, los compradores habituales conocen a la perfección el procedimiento, pero que, en el último tiempo, “se han sumado nuevos interesados que al momento de la subasta tienen muchas dudas al respecto”.
Por ello recomendó que confíen en la empresa martillera, que se entrenen para familiarizarse con el proceso, que se informen e investiguen valores de mercado y oportunidades de negocio; que revisen los términos y condiciones; y, por último, que no esperen hasta los últimos segundos para ofertar.
Los 6 tips más relevantes:
- Sentirse invitado y confiar en la empresa martillera: buscar qué antigüedad tiene y cuántos clientes
- Entrenamiento para familiarizarse con el proceso: una buena manera de entender la metodología y funcionamiento de la subasta es presenciar subastas previas, puede ser solo como espectador, para poder sacar conclusiones de la dinámica y de los valores.
- Informarse: Se recomienda despejar todas las dudas con antelación, para llegar con la mayor información posible de los lotes al momento del remate.
- Investigar valores de mercado y la búsqueda de oportunidad de negocio: es ideal llegar a la subasta con el conocimiento del valor real de mercado del lote de interés porque eso permite tener un precio de referencia como guía, para ofertar por debajo de ese precio y culminar haciendo un buen negocio.
- Términos y condiciones: Este es un punto importante a leer, ya que tiene que ver con los costos del remate. Si la oferta tiene incluido el IVA, si existen gastos administrativos, si es un monto fijo o proporcional, porque todo eso impactará en el valor del bien. Si se puede comprar en comisión, si hay que transferirlo, etc.
- En qué momento ofertar: No es aconsejable esperar a los últimos segundos para hacer la oferta, porque en ese momento juega la ansiedad o la falta de experiencia que pueden llevar a equivocarse.
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