La suba del blue paralizó del todo el mercado inmobiliario

La escalada del dólar blue paralizó la compraventa de propiedades en enero. Distintas inmobiliarias consultadas por LA NACION informaron que fueron pocas las operaciones que se concretaron durante el primer mes del año. "Sólo se dio curso a transacciones que estaban pactadas, que tenían obligación de cumplirse, o los casos en los que había urgencia de vender", dijo Roberto Arévalo, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina.

En enero, el dólar blue acumuló una suba del 16,6%, la mayor desde el inicio del cepo cambiario. Su cotización a fines de mes llegó a $ 7,93 y la brecha respecto del dólar oficial marcó un record de 59%. La perspectiva negativa que algunas inmobiliarias anticiparon meses atrás se cumplió. "Si bien aumentó el número de consultas y de visitas, el avance del dólar libre impidió reactivar el mercado de las propiedades por la imposibilidad de fijar precios", comentó Jorge Toselli, presidente de JT inmobiliaria.

Según explicó José Rozados, director de Reporte Inmobiliario, últimamente se concretaban operaciones en las que se tomaba como forma de pago combinaciones de inmuebles o dólares y pesos pactados a un promedio entre la cotización del dólar oficial y el blue. Pero la ampliación de la brecha cambiaria imposibilitó concretar operaciones. "En un escenario así no hay incentivo para que los vendedores se desprendan de sus inmuebles y reciban pesos. No hay alternativas de inversión que preserven después el valor de los pesos que reciben. Hoy vende quien tiene necesidad", afirmó Rozados.

El operador inmobiliario Carlos Sotelo sostuvo que, como el mercado está inactivo, los precios están intactos. "Los vendedores han retirado sus propiedades del mercado. Los compradores esperan que los precios caigan por el desfase que se produjo". Para Sotelo, sin embargo, aún es apresurado pronosticar el futuro de los precios.

En cambio, para Toselli, los precios de los inmuebles caerán un poco. "Creo que el mercado se reactivará en marzo. El contexto macroeconómico no es alentador. Quienes no pueden esperar y tienen que vender lo harán a precios más bajos", sostuvo.

En esto coincide Iuri Izrastzoff, director de Izrastzoff Bienes Raíces: "Al ver que no llegan compradores, los vendedores estarán más receptivos a aceptar contraofertas más agresivas. Los precios caerán un poco para los inmuebles debajo de los 150.000 dólares". Izrastzoff aclaró que en el segmento AB, la actividad no cayó y que los precios se mantienen. "Se trata de un segmento que tiene dólares y que siempre pensó el precio de los inmuebles en dólares. No toma el peso como unidad de medida", dijo.

Hoy la actividad de las inmobiliarias gira principalmente en torno a los alquileres. Los propietarios prefieren sacar los inmuebles de la venta y alquilar para compensar los costos de mantenimiento. "Este es un mercado activo, con una oferta y demanda equilibrada, sin volatilidad de precios en pesos y con ajustes anuales cercanos a la inflación estimada por los privados o a los acuerdos paritarios", señaló Arévalo. "En los segmentos ABC1, los alquileres se siguen denominando en dólares", agregó.

Antonio Ginevra, presidente de Aranalfe, aportó una nueva perspectiva: "En el último tiempo ha crecido la demanda de locales comerciales porque ha crecido la cantidad de emprendimientos domésticos. Hay una transformación en la economía porque más personas están optando por invertir en franquicias o negocios propios como forma de inversión y de complementar los ingresos familiares. También ciertos negocios que buscan reinventarse o reposicionarse y buscan cambios en sus locaciones: bancos, ferreterías, farmacias, cadenas de comidas rápidas, se amplían, se achican, se mudan o abren nuevas sucursales", dijo.

Si bien Toselli afirmó que varias inmobiliarias están cerrando sucursales y achicando su estructura, Ginevra propone explorar nuevos horizontes, acercar nuevas opciones a los clientes para sobrellevar la caída en la dinámica del mercado inmobiliario.

• 16,6%Alza del paralelo Ese fue el aumento en enero; la brecha con el oficial llegó al 59 por ciento

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Equipo LN Data