En Europa, buscan llevar tranquilidad a los mercados
Brown prometió hoy que su gobierno hará todo lo posible para mantener la estabilidad del sistema financiero; "la incertidumbre no ha disminuido y los acontecimientos de la último semana no han ayudado", dijo Almunia
Diferentes autoridades europeas buscaron hoy, después de otro día negro en las bolsas del mundo, enviar una señal de distensión a los inversores de su región.
El primer ministro británico, Gordon Brown, prometió hoy que su gobierno hará todo lo posible para mantener la estabilidad del sistema financiero y proteger los depósitos de los ahorradores del país.
En unas declaraciones a la prensa en su residencia oficial de Downing Street, Brown dijo que es necesaria una reforma del sistema financiero para impedir que se repita la crisis de esta semana.
"Nuestra determinación es hacer todo lo posible para mantener la estabilidad del sistema financiero y proteger los depósitos en el Reino Unido, que necesitan tener confianza en el sistema financiero", resaltó el jefe del Gobierno.
Brown señaló que el Gobierno tomó la "medida correcta" al apoyar la fusión del Lloyds TSB y el Halifax Bank of Scotland (HBOS). "Creo que, no sólo hemos tomado la medida correcta, sino que hemos dado más estabilidad al sistema financiero", añadió.
Defendió la necesidad de poner en marcha medidas globales para hacer frente a un "problema global".
La UE. Por otro lado, el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, dijo hoy que desconoce cuál será la duración de la turbulencia en los mercados después de que los acontecimientos de la semana pasada elevaran el nivel de incertidumbre y redujeran el optimismo.
En una conferencia organizada por el regulador bursátil español, Almunia expresó: "Todavía no tenemos idea sobre la duración de esta turbulencia y cuándo volverá la normalidad a los mercados".
"La incertidumbre no ha disminuido y los acontecimientos de la último semana no han ayudado". agregó.
Almunia indicó que la inflación de la zona euro seguirá desacelerándose durante el resto del año pero que los sobresaltos económicos podrían bajar la tasa de crecimiento potencial de Europa.
Agregó que el 2008 fue un año muy difícil desde un punto de vista económico, "el momento más difícil que recordamos (...) uno marcado por una serie de sobresaltos".