Emprendedores. La pyme fundada por dos amigos que hoy exporta un producto sostenible a todo el mundo
Tomás Beutin (31) y Federico Schaer (30) se conocieron cuando trabajaban juntos en una pyme hace casi 10 años. Se animaron a emprender en una Argentina vertiginosa y cambiante, y hoy crearon un producto innovador que lleva a la gastronomía argentina a otro nivel en todo el mundo.
Las tendencias del mercado gastronómico están migrando hacia un lugar de mayor sostenibilidad en la salud y el medio ambiente. Tomás y Federico, son dos jóvenes emprendedores que escucharon las demandas de los consumidores y crearon un producto de la más alta calidad que dura para siempre: sartenes 100% de hierro sin químicos ni agregados.
“Al cocinar en hierro no hay riesgos de que la comida tenga restos de químicos o metales pesados. Queremos concientizar a la gente para resaltar la importancia de consumir productos más saludables” aseguró Federico Schaer, socio fundador de Kankay, un emprendimiento que nació de una conversación entre dos amigos de la infancia, apasionados por la parrilla y la cocina.
Las sartenes de hierro no contienen los productos químicos que se usan en algunos recubrimientos de teflón, como el PFOA (una sustancia química sintética utilizada en la fabricación de productos antiadherentes) que ahora está mayormente prohibido; y sin embargo, en la mayoría de las sartenes que tenemos en la cocina todavía persiste. A altas temperaturas, el teflón puede liberar sustancias tóxicas, mientras que el hierro fundido es seguro y, de hecho, aporta pequeñas cantidades de hierro a la comida, algo beneficioso para la salud.
Las sartenes de hierro están diseñadas para durar generaciones y se vuelven más antiadherentes con el tiempo a medida que se “curan”. El proceso de curado crea una superficie que no requiere tanto aceite, y estas sartenes pueden pasar del fuego directo al horno sin problemas.
Beneficios de cocinar en sartenes de hierro
Las sartenes de hierro son extremadamente duraderas y se distinguen por su capacidad antiadherente natural, lo que permite cocinar con menos aceite o manteca. Es posible que al principio se peguen algunos alimentos, pero con el tiempo y el uso la sartén desarrollará esta característica de forma espontánea. Estas sartenes son muy versátiles, ya que son aptas para cocinas eléctricas, de gas, de inducción, vitrocerámica y parrilla.
A diferencia del teflón o el aluminio que desprenden pequeñas particulas tóxicas que se incorporan en los alimentos que vamos a consumir, las sartenes de hierro no presentan sustancias que puedan llegar a ser perjudiciales para nuestro cuerpo.
La característica distintiva de las sartenes Kankay es su mango de hierro, permitiendo su uso en el horno y ampliando las opciones culinarias. Al estar principalmente hechas de hierro, estas sartenes se adaptan a cualquier fuente de calor, soportan altas temperaturas y se conservan en mejor estado. Aunque tardan en calentarse, una vez que lo hacen, distribuyen de manera uniforme el calor, lo que mejora la cocción de tus alimentos y ahorra energía.
Cocinar con hierro tiene sus trucos. Para los amantes de la cocina esto es una ventaja, ya que se aprenden nuevas técnicas de cocina con cada plato.
Los utensilios de cocina de hierro fundido también brindan la posibilidad de preservar y realzar el sabor de los platos. Además, es posible cocinar todo tipo de comidas en este material. Un tip: es aconsejable tener precaución con los alimentos ácidos (como el tomate, vinagre o limón) que pueden causar oxidación en el hierro, se sugiere reducir su consumo hasta que la capa antiadherente sea resistente.
La clave ecológica además, es que las sartenes de hierro fundido tienen una vida útil mucho más larga que las de teflón, que suelen desgastarse con el tiempo y terminar en la basura. Además, el hierro fundido puede reciclarse o reutilizarse. Al optar por una sartén de hierro que puede durar décadas, se colabora en la reducción de residuos de teflón y otros materiales tóxicos.
Paso a paso: ¿Cómo curar las sartenes de hierro?
La forma de curar las sartenes de hierro es muy simple, solo se necesita aceite vegetal o grasa, papel de cocina y calor. Es necesario realizar este procedimiento antes de utilizar por primera vez el producto.
- Limpiar la sartén antes de iniciar el proceso de curado.
- Poner una pequeña cantidad de aceite en la superficie, cubriendo el mango y la base, y después frotar la pieza con un paño seco.
- Colocar la sartén en contacto con el calor de la hornalla, horno o llama directa durante unos minutos o hasta que se empiece a notar que el material se oscurece.
Cumpliendo estos pasos la sartén ya está lista para su uso. Es normal que el color no quede uniforme, la sartén puede ser utilizada igual.
El procedimiento de lavado y mantenimiento de las sartenes de hierro es sumamente simple:
- Lavar con agua caliente sin dejar restos de comida. Se puede utilizar una esponja/virulana con agua o detergente.
- Secar bien toda la superficie del producto para su posterior uso y no dejar en remojo.
Una historia de éxito y talento argentino
Crear momentos y compartir experiencias: esos son los motores de Federico y Tomás a la hora de producir. La idea de crear productos que permitieran a otros disfrutar de esa misma experiencia de conexión y tradición que tanto valoraban, surgió en un asado con amigos y familia. Así como ellos crecieron rodeados de momentos alrededor del fuego, querían transmitir ese legado a través de utensilios de calidad excepcional.
Forjados artesanalmente por expertos herreros argentinos, cada producto es una pieza única, fruto de generaciones de conocimiento que aseguran una cocción perfecta, sin químicos ni revestimientos dañinos, ideal para preparar comidas saludables y auténticas. Otra clave del proyecto: cada pieza se produce 100% en Argentina. La apuesta por emprender y crecer en una Argentina cambiante es lo que impulsa al desarrollo del proyecto.
“Emprender en estas condiciones de mercado nos brinda herramientas para enfrentar cualquier contexto” aseguró Tomás Beutin que también quiere desmitificar el dicho de que “lo de afuera es mejor”. Ambos afirman que seguirán apostando a producir en el país y brindar oportunidades de futuro y crecimiento para los talentos que emplean.
Transversales a cualquier gobierno o color político, los jóvenes supieron aprovechar cada momento para aprender algo y tomar lo positivo. Pudieron sortear el obstáculo de la pandemia y transformarlo en un impulso para exportar cada vez más, y asegurarse la distribución internacional.
Actualmente, sus artículos se encuentran en 20 países mediante servicios de envíos puerta a puerta para clientes directos, y exportan contenedores enteros para distribuidores. El 40% de sus productos van a países como Estados Unidos, Australia, Alemania, Reino Unido, Brasil, Chile, Italia, España, Canadá y Uruguay.
Nada los frena: un producto que promete crecer tras la tendencia de la sostenibilidad alimentaria, y que pone nuevamente a Argentina en boca de todo el mundo. Si pudiéramos resumir su historia en 3 conceptos serían: talento argentino de exportación, ganas de crecer y mucho camino por recorrer.
Conocé más en kankayargentina.com
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