El gobierno de Gabriel Boric sepulta una ambiciosa obra minera de hierro y cobre
Hacía más de una década que el proyecto Dominga estaba en trámite de aprobación; iba a significar una inversión de US$ 2500 millones, pero tuvo fuertes objeciones de ambientalistas
- 5 minutos de lectura'
SANTIAGO, Chile.– A minutos de sellar su triunfo en las urnas y en el primer discurso que realizó como presidente electo hace poco más de un año, Gabriel Boric desplegó una breve pero reveladora frase en la que advirtió su posición frente al proyecto minero más polémico de los últimos años en Chile.
“No queremos más zonas de sacrificio, no queremos proyectos que destruyan nuestro Chile, que compren y destruyan a las comunidades. Y lo ejemplificamos en un caso que ha sido simbólico: ¡No a Dominga!”, aseguró Boric aquel 19 de diciembre de 2022, frente a una multitud en el centro de Santiago que celebró aquella alusión.
A poco más de un año después de aquel discurso, y concretando una de las promesas de campaña del actual mandatario, el gobierno chileno le dio un portazo al polémico megaproyecto minero y portuario Dominga, ubicado en la Región de Coquimbo, en la localidad de La Higuera, y cuya construcción significaría una inversión aproximada de 2500 millones dólares y cuya tramitación ambiental se ha extendido por más de 10 años.
El Comité de Ministros rechazó en forma unánime el proyecto y acogió 12 reclamos en contra de la iniciativa, generadas a partir de diversas solicitudes de personas y organizaciones en contra de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) de la iniciativa, aprobada en agosto de 2021 durante el gobierno de Sebastián Piñera.
La ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, fue quien encabezó la instancia, y tras la sesión explicó las razones del rechazo a la iniciativa que contempla la construcción de dos minas a cielo abierto –de hierro y cobre–, además de un puerto en la comuna de La Higuera y una planta desalinizadora de agua de mar.
“Nos tocó pronunciarnos sobre 12 reclamaciones en contra de este proyecto. Tienen que ver con varios aspectos: vida marina, líneas base, áreas de influencia, evaluación de distintas especies. También hay reclamaciones con respecto a los impactos de la desaladora y de la mina misma, que está asociado con calidad del aire y material particulado”, dijo Rojas, quien previo a esta votación enfrentó un recurso de protección en su contra por parte de pescadores de la zona debido a sus opiniones de rechazo al proyecto (presentadas antes de llegar al cargo) y su cercanía con la ONG ambientalista Oceana.
Apelación
Desde la empresa Andes Iron (de propiedad de capitales privados ligados a las chilenas familias Délano y Garcés) anunciaron que recurrirá en los tribunales la decisión del gobierno. La iniciativa fue aprobada en agosto de 2021 por la Comisión Ambiental de Coquimbo y en mayo la Corte Suprema rechazó los recursos contra el proyecto.
“No nos sorprende el resultado considerando la intervención política del Comité de Ministros que favorece la judicialización y retrasa una respuesta definitiva respecto de una inversión tan relevante para la región de Coquimbo y la minería chilena”, expuso la firma en un comunicado.
Por su parte, el alcalde de La Higuera, Yerko Galleguillos, militante del partido de derecha Unión Demócrata de Independiente (UDI) criticó el rechazo a la iniciativa y puso sobre la mesa el eterno choque entre progreso y medioambiente. “La gente habla de la extinción del pingüino y del pato Humboldt, pero yo hablo de la extinción de mis vecinos, que no tienen trabajo”, aseguró la autoridad. “¿Cuándo vamos a hablar del hombre y vamos a dejar de hablar de los pescaditos y los pajaritos?”, manifestó en controversiales dichos que tuvieron alta repercusión en el país.
El ministro de Economía, Nicolás Grau, aseguró que el gobierno de igual modo ya trabaja en un plan para impulsar a la comuna. “No están solos, nosotros como gobierno los vamos a apoyar”, dijo.
Oposición
El principal factor que ha generado polémica en Chile en torno al proyecto, tiene que ver con las consecuencias medioambientales que generaría en la zona donde se pretende instalar el puerto, distante a 30 kilómetros de la Reserva Nacional del Pingüino de Humboldt, uno de los ecosistemas más importantes del mundo donde vive el 80% de esa especie de pingüinos y donde también se encuentran las Reservas Marinas Isla Chañaral, Isla Choros e Isla Damas.
Y aunque la propia compañía Andes Iron se había comprometido a crear un centro de investigación y estudios socio-ambientales destinado a proteger el medio ambiente de La Higuera e instalar un centro de investigación científica para el seguimiento y estudio del pingüino de Humboldt –junto con otras medidas como la construcción de un solo puerto– un número importante de organizaciones medioambientales se opusieron al proyecto desde sus génesis.
“Hay dos dimensiones en este tema, el político y el medioambiental que son muy potentes. Lo político tiene que ver porque ha sido un proyecto que ha pasado por los gobiernos de Michelle Bachelet, Sebastián Piñera y que enfrenta el de Gabriel Boric. Esta fue una promesa de campaña del actual gobierno y también ha sido simbólico porque una de los inversionistas detrás del proyecto es amigo del expresidente Piñera”, dijo a LA NACION Felipe Kong, académico de la facultad de Educación de la Universidad Diego Portales (UDP).
Otras noticias de Chile
“La vida y sus bigbanes”. Gabriel Boric anunció que será padre por primera vez
Tragedia en la frontera. Un camionero chileno y dos argentinas murieron tras un choque en el paso Los Libertadores
“Crecimiento sin precedente”. Volvió la invasión de las valijas de argentinos a los shoppings de Chile: qué compran
Más leídas de El Mundo
Venganza. El líder de los insurgentes en Siria prometió “perseguir” a exfuncionarios de Al-Assad
Impresionante escena. La liberación de un prisionero del régimen de Al-Assad que fue encontrado por una periodista de CNN en una celda secreta
Instantáneas. Londres de los años ‘30 en 14 fotos históricas
LA NACION en Siria. Una bienvenida con kalashnikovs, ciudadanos que huyen y euforia por la “liberación”