El nacionalismo vasco logró un nuevo mandato

MADRID.- El nacionalismo vasco retuvo una vez más el gobierno regional de ese conflictivo territorio peninsular gracias al crucial apoyo de dos parlamentarios del llamado Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV), considerado aquí el nuevo refugio político de sectores cercanos al terrorismo separatista.

La prensa española recibió entre crítica y escéptica el proceso electoral por el que el dirigente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Juan José Ibarretxe, retuvo el cargo de "lehendakari".

"Estará sujeto de la correa que manipula ETA... funcionará a control remoto de lo que ella diga", es apenas un ejemplo del duro sarcasmo con que el humor político evaluó la participación de la izquierda radical nacionalista en la nueva designación de Ibarretxe.

Más seria todavía parece haber sido la primera reacción en el Parlamento regional vasco. Allí, legisladores del socialismo y del derechista Partido Popular (PP) anticiparon por igual que "no se sentarán" a una mesa de diálogo político en la que participen los amigos de ETA, si antes no condenan la violencia de la banda.

Ambos partidos rechazaron así, de antemano, la propuesta electoral con la que Ibarretxe sedujo el voto de los radicales del PCTV: una mesa de diálogo en la que también participe Batasuna, el partido político disuelto por la justicia nacional, tras culpabilizarlo de vinculación con el terror separatista.

El protagonismo de la izquierda radical en el nuevo gobierno vasco se produce en un momento delicado para la región, pendiente de una posible tregua con ETA, impulsada por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.

"Pido un voto de confianza para seguir adelante con esa gestión. Sé por qué lo hago. Manejo información que, por razones de seguridad, no puedo hacer pública", dijo Zapatero a familiares de víctimas de ETA que, días atrás, lo visitaron para expresar su rechazo a un diálogo con la banda.

Lo cierto es que el PCTV está esperanzado tanto con una posible tregua como con la concreción de una mesa en la que se reivindique a Batasuna. "Le hemos dado dos votos a Ibarretxe a cambio de un escenario político", se sinceró su vocera, Nekane Erauskin. "Estos dos votos tienen como principal objetivo abrir una esperanza de paz para la región", añadió.

La eventualidad de una tregua con ETA fue admitida por el gobierno socialista de España, que obtuvo permiso parlamentario para negociarla.

Muchos sectores sociales españoles se oponen por entender que sería un fraude y una cesión gratuita ante la banda que hace más de 30 años asesina en nombre de la independencia del territorio vasco español y francés.

Preocupación de Fraga Iribarne

• MADRID (DPA).- El candidato a la presidencia de Galicia por el conservador Partido Popular (PP), Manuel Fraga Iribarne, dijo ayer que "algo no funciona" en Venezuela, al expresar su preocupación por la demora en la llegada de los votos de los emigrantes procedentes de ese país. Los sufragios de emigrantes, cuyo recuento está previsto para el próximo lunes, son decisivos para determinar la mayoría absoluta en el Parlamento gallego y la victoria de Fraga o de su rival, el socialista Emilio Pérez Touriño. Fraga agregó que "se han hecho ya unas gestiones" en Venezuela, pero que "las excusas que se han dado hasta ahora no parecen satisfactorias".

Por Silvia Pisani

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