Kathleen Folbigg: las primeras palabras de la australiana indultada por el crimen de sus cuatro hijos
En un mensaje grabado, la mujer dijo que estaba “extremadamente honrada” por el perdón y la excarcelación, y calificó su liberación como una gran victoria para “la ciencia y especialmente la verdad”
- 3 minutos de lectura'
SÍDNEY (AFP).- “Siempre pensé y siempre pensaré en mis hijos. Lloraré por ellos, los extraño y los amo terriblemente”, fueron las primeras palabras que, de manera escueta, dijo Kathleen Folbigg, la australiana condenada por la muerte de sus cuatro hijos y recientemente indultada después de 20 años de permanecer en prisión. La mujer era conocida como “la peor asesina en serie de Australia” tras ser sentenciada en 2003 por cargos de asesinato de tres de sus hijos y el homicidio involuntario del cuarto.
En un mensaje de video que dura alrededor de 30 segundos, en el que agradeció especialmente a sus familiares y amigos, Folbigg, de 55 años, dijo que estaba “extremadamente honrada” por el indulto y la excarcelación, y calificó su liberación como una gran victoria para “la ciencia y especialmente para la verdad”.
Ahora, la mujer luchará por borrar sus condenas, según anunciaron sus abogados.
Folbigg fue excarcelada por la falta de evidencia forense que la vinculara con la muerte de los niños, situación que la mantuvo detenida durante 20 años. En el último tiempo, hubo avances científicos que permitieron conocer mutaciones genéticas y que colaboraron para explicar por qué murieron algunos niños, lo que abrió el camino para la liberación de la madre.
El fiscal general del estado de Nueva Gales del Sur, Michael Daley, declaró que una investigación iniciada en mayo de 2022 estableció una “duda razonable” en torno a las condenas. “En aras de la justicia, Folbigg debe ser liberada de custodia lo antes posible”, declaró ayer el funcionario.
Aunque obtuvo su libertad, Folbigg debe emprender un proceso legal separado para revertir su condena. Rhanee Rego, abogada de la mujer, dijo que el sistema judicial australiano “le falló a cada paso” y que las autoridades se tomaron demasiado para reabrir el caso.
Una historia resonante
La Academia Australiana de la Ciencia, que tuvo un papel central en el caso de Folbigg, calificó su condena como “el mayor error judicial” en la historia del país. Folbigg fue excarcelada ayer de una prisión en Grafton, en el norte del estado de Nueva Gales del Sur, donde cumplía una sentencia de 25 años.
En 2021, decenas de científicos de Australia y del exterior firmaron una petición solicitando la liberación de la mujer, al señalar que la evidencia forense sugería que las muertes inexplicadas de los niños estaban ligadas a raras mutaciones genéticas o anormalidades congénitas. Alegaron entonces que era muy raro que cuatro niños murieran repentinamente sin explicación.
Sin embargo, el juez retirado Tom Bathurst, quien encabezó la nueva investigación, señaló luego de que se encontraran condiciones médicas que podrían responder por tres de las muertes. Dijo que dos niñas tenían una rara mutación genética mientras que un niño habría tenido una “condición neurogénica subyacente”. Dados estos factores, el magistrado determinó que la muerte del cuarto niño tampoco resultaba sospechosa.
Temas
Otras noticias de Australia
“Están haciendo daño de verdad”. Australia prohibirá por ley el acceso a redes sociales a menores de 16 años
“Usted no es mi rey”. El video del incómodo momento que vivió Carlos III cuando lo increpó una senadora en Australia
Desapareció hace 80 años. Descubren hundido un bombardero “fantasma” que sirvió en la Segunda Guerra Mundial
Más leídas de El Mundo
"Defensa mutua". Tropas de Corea del Norte ya combaten junto al Ejército ruso contra los ucranianos que ocupan Kursk
Peligro de inundaciones. Cuba en alerta ante la llegada del huracán Rafael que amenaza con tocar tierra en el occidente de la isla
El impacto global. El mundo se prepara para otra era de alto riesgo con Trump en la Casa Blanca
Repudio a Netanyahu. Crecen las protestas en Israel por el despido del ministro de Defensa, que priorizaba el rescate de los rehenes