Puerto Rico profundiza su crisis por María

SAN JUAN.- La crisis provocada por el huracán María se agravó ayer en todo Puerto Rico, con localidades sin agua potable, electricidad, nafta ni comunicaciones después del devastador paso del ciclón de categoría 4, mientras se teme el posible colapso de una represa.

El número de muertos se elevó a siete, después de que ayer se encontró un cadáver en un río, aunque se estima que esa cifra probablemente aumente cuando acabe el relevamiento en el territorio.

El riesgo más grave surge de las grietas detectadas en una represa río arriba de los pueblos de Quebradillas e Isabela, en el noroeste de la isla, que obligó a un llamado a evacuar la zona.

"No hay manera de saber cuánto tiempo o qué pasará con esto. Por eso las autoridades están tomando medidas rápidamente, porque ellos también están viendo los peligros por todos los escombros. Ésta es una situación muy, muy mala", dijo Anthony Raynes, meteorólogo del Servicio Meterológico Nacional de Estados Unidos.

Un grupo de alcaldes agobiados por la emergencia se reunieron en la capital con el gobernador de la isla, Ricardo Rosselló, y le presentaron una larga lista de artículos que necesitan con urgencia. El alcalde de Manati, en el norte del país, lamentó entre lágrimas que la ciudad costera se quedó sin agua, sin nafta, y que el hospital local está casi desbordado.

Según concluyó el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, de gira por la isla, las fuertes inundaciones, los daños estructurales en las casas y la caída de la energía eléctrica son los tres problemas más apremiantes que enfrenta la desesperada población.

Agencias AP y Reuters