La conmovedora historia de amor de Chadwick Boseman y Taylor Simone Ledward

Era el momento que muchos espectadores estaban esperando y, al mismo tiempo, el más doloroso. El domingo por la noche, en la entrega de los premios Oscar, el actor Chadwick Boseman cerraba el segmento del In Memoriam y las sensaciones eran encontradas.

Por un lado, al actor le llegaba el tan esperado reconocimiento con una nominación esa noche por La madre del blues, luego de demostrar su talento en, entre otras producciones, la brillante biopic Get on Up y en Pantera negra, el film de Marvel que lo conectó con una audiencia masiva. Por el otro, era atestiguar cómo, una vez más, su viuda, Taylor Simone Ledward, lo miraba en la pantalla y el vacío se volvía ineludible.

Boseman murió el 28 de agosto de 2020, a los 43 años, a causa de un cáncer de colon, que le había sido diagnosticado en 2016, pero sobre el cual nunca se refirió públicamente. De hecho, cuando se informó la triste noticia, el comunicado también mencionaba que el actor se había casado. “Murió en su casa, con su esposa y su familia a su lado”, rezaba en el texto. Sin embargo, esa parte luminosa de su vida, esa boda, también se mantuvo en la intimidad. La historia de amor entre ambos iba a contramano de los estándares de Hollywood: por el camino del perfil bajo, sin la necesidad de la exposición en las redes o en entrevistas.

Una relación alejada de los medios

La primera vez que los flashes los captaron juntos fue a comienzos de 2015, cuando estaban por tomar un vuelo en Los Ángeles. Luego comenzaron a surgir imágenes de manera esporádica, desde la presencia de Simone en el programa de Jimmy Kimmel, hasta aquella vez en la que se los veía felices disfrutando de una partido de la NBA en 2018. A pesar de la notoriedad que cobraron aquellas postales el mismo año del estreno de la película de Marvel, no fueron los novios sino la madrina de Ledward quien brindó una escueta declaración a la publicación In Touch Weekly. “Se respetan mucho, ella está muy feliz, y él también”, contó la mujer, confirmando el romance. Al poco tiempo, ellos mismos terminaron hablando de su afianzada relación tanto en las red carpet de Pantera negra como en los premios del Sindicato de Actores de Estados Unidos (SAG) de 2019.

Boseman ya no podía ocultar sus sentimientos por la cantante, y ese mismo año, cuando ganó en los NAACP Image Awards como mejor actor por el rol de T’Challa que marcó a fuego a la audiencia, finalmente le dedicó unas palabras a su esposa tras darle un beso. “Ya saben lo que dicen: la gente afroamericana siempre le agradece a Dios cuando gana y yo no voy a decepcionarlos. Gracias Dios, pero no solo por ganar este premio. Gracias Dios por las pruebas que nos ponés en el camino para que podamos apreciar la felicidad que llega cuando ganamos. Simone, estás conmigo todos los días. Tengo que decirlo en este momento. Te amo”, expresó un emocionado Boseman quien, sin que muchas personas lo supieran, estaba batallando contra la enfermedad en la peor instancia de la misma, lucha a la cual aludía en su poderoso discurso.

La peor noticia y el legado que perdura

El anuncio de su muerte conmocionó no solo a sus admiradores sino también a figuras del espectáculo que no estaban al tanto de lo que sucedía puertas adentro. Como había mencionado en ese memorable discurso, Simone estuvo a su lado todos los días, y ese casamiento tan simple pero tan extraordinario al mismo tiempo se produjo tan solo unos meses antes del fallecimiento de Boseman, como si se tratara de su último deseo.

Su actuación en el film de Netflix, La madre del blues, no pasó inadvertida en la temporada de premios y Simone, quien jamás habló con la prensa de su vida personal, no quiso defraudar a Chadwick y estuvo, de manera virtual, aceptando cada premio con una encomiable entereza.

“No tengo sus palabras, pero tenemos que aprovechar los momentos para celebrar a quienes amamos. (...) Él agradecería a Dios, agradecería a sus padres, agradecería a sus antepasados por su guía y sus sacrificios. Él diría algo hermoso. Algo inspirador, algo que amplificara esa pequeña voz dentro de nosotros que nos dice que podemos hacerlo, que sigamos adelante”, expresó cuando Boseman ganó el Globo de Oro. Lo mismo había sucedido cuando en los premios Gotham se le rindió tributo al actor, quien este año también cosechó nominaciones en ciertos circuitos por su rol secundario en la película 5 sangres de Spike Lee.

“Es un honor recibir este premio en nombre de mi esposo”, expresó la artista, quien aseguró que el galardón también es un modo de honrar “su impacto en esta industria y en este mundo”. “Es la persona más honesta que conocí. Imperfecto pero decidido. Tuvo la bendición de vivir muchas vidas dentro de una. Desarrolló su comprensión de lo que significaba ser el uno, el ninguno y el todo. ‘Un recipiente para ser vertido dentro y fuera’”, sumó.

Y añadió: “La buscó [a la verdad] activamente, en sí mismo, en quienes lo rodean. La verdad puede ser algo muy fácil de evitar para uno mismo. Pero si uno no vive en la verdad, entonces es imposible vivir la vida”. Ledward aseguró que Boseman “aprovechó el poder de dejar ir y de dejar que el amor de Dios brille” y que se dio cuenta “de que cuando uno es capaz de reconocer que cuando su fuerza no proviene de uno mismo, rara vez se equivoca”.

Ella siempre habla de luz y lo cierto es que Boseman, con ese memorable carisma que no puede fingirse, irradiaba una energía que su mujer supo transmitir en la agridulce temporada de premios. Como ella misma manifestó en una ocasión: “No dejemos que su convicción sea en vano. Que nuestros espíritus sean un terreno fértil para que caiga la sabiduría de Dios. Así que gracias. Alabado sea Dios. Chad, gracias. Te amo. Estoy muy orgullosa de vos. Seguí brindándonos tu luz”.

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