Netflix: Sam Elliott, en El héroe, el western de su vida
El héroe (The Hero, Estados Unidos, 2017). Dirección: Brett Haley. Guion: Brett Haley, Marc Basch. Fotografía: Rob Givens. Montaje: Brett Haley. Elenco: Sam Elliott, Laura Preppon, Nick Offerman, Krysten Ritter, Katharine Ross. Duración: 96 minutos. Disponible en: Netflix. Nuestra opinión: muy buena.
Lee Hayden (Sam Elliott) es el héroe de una única película. Eso le bastó para quedar en la memoria de los fanáticos del western, aquellos cultores que celebran el encuentro –como decía el crítico André Bazin- entre una mitología y un medio de expresión. De la galería de esos mitos, Lee es aquel que vive de recuerdos. En su presente, queda una hija con la que apenas se habla, algunas publicidades de salsa barbacoa, las tardes de marihuana con su vecino y el sueño de una nueva película que nunca llega. Pero un día la noticia de una enfermedad lo saca de ese indefinido letargo; como en el western que evoca en sus sueños, el camino de huida lo encuentra acorralado en el desierto, frente a un destino que no le deja escapatoria.
Brett Haley construye El héroe (película de 2017 nunca estrenada en la Argentina y que ahora está disponible en Netflix) alrededor de su protagonista, de esa voz áspera y profunda que hizo de Sam Elliott también un héroe tardío de un género en lenta agonía. A diferencia de Clint Eastwood que dio el salto en el momento justo –del serial televisivo al spaghetti western y de ahí a una carrera sólida e inteligente como actor y director- , Lee perdió todos los trenes. Quedó esperando en la estación para siempre, dueño de un único acto de despedida. El homenaje que una simpática asociación de fanáticos del género le organiza se convierte en una tibia reivindicación, en un paso de comedia que junto al encuentro con Charlotte (Laura Preppon) iluminan esa vida en letanía.
El héroe está llena de pequeños grandes momentos: la lectura de la poesía de Edna St. Vincent Millay, el perfil de Sam Elliott mirando el mar, el rostro de Diane, la sorprendida asistente a la ceremonia de premiación que se lleva el galardón de Lee ante la inesperada ovación del público. Pieza a pieza Haley equilibra la melancolía por un mundo extinguido, el del western pero también el de esos héroes de otro tiempo, con un humor despojado de cinismo y arrogancia. Su cámara entiende que los tiempos son los de su protagonista, capaz de emocionarse hasta las lágrimas con los diálogos de una película del espacio que imagina, por unos días, como su glorioso regreso.
Y la película también condensa esa única certeza que el cine es capaz de regalarnos. Que aquellos encuentros que duran unos minutos en la pantalla persisten en la memoria fílmica por siempre. Con más emociones de las que hubieran preferidos los exégetas del western, Haley consigue una película honesta y luminosa, que descubre en lo pequeño de una vida el valor de su gran recuerdo.
Temas
Más leídas de Espectáculos
Con Léa Seydoux. Amor sin tiempo es una película arriesgada y distópica, inspirada en Henry James y la desconexión emocional de nuestros días
Potencia y precisión. Guerra civil: un inquietante escenario futurista que hoy está lejos de ser visto solo como ficción
De Timothée Chalamet a Theo James. Quiénes son los cinco actores que protagonizan las biopics musicales más esperadas