Feliciano López. Dos buenas: va a ser papá y su madre se curó del covid-19

Ninguno de los dos puede disimular la sonrisa. Es que Feliciano López (38) y Sandra Gago (24) están en la dulce espera, tal como adelantó ¡HOLA! en exclusiva. La pareja, que pasó el aislamiento en su casa, espera su primer hijo para diciembre (la modelo está embarazada de tres meses, de un varón), y disfrutan de este presente de pura ilusión acompañados por el cariño incondicional de los suyos. A menos de un año de su boda –se casaron en septiembre de 2019 en Marbella, cuando se cumplían exactamente dos años desde que se vieron por primera vez–, hicieron realidad su sueño más anhelado.

Pero semejante noticia viene acompañada de otra gran alegría para el tenista nacido en Toledo porque su mamá, Belén Díaz-Guerra, de 64 años –enfermera de profesión y que ha estado al pie del cañón desde que se desató la pandemia– se recuperó de coronavirus tras haberse contagiado en la clínica privada de Alcorcón, en el sur de Madrid, donde trabaja. "Mi madre se ha curado del Covid-19 gracias a Dios y está deseando volver a su trabajo porque dice que hacen falta muchas manos en estos momentos en su hospital", contó Feliciano en una carta enviada al alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, publicada por el diario ABC. "Ahora que ya lo ha superado estamos todos muy orgullosos de su fortaleza y entereza", agregó el tenista, quien también tuvo palabras de admiración para el resto de los trabajadores de la salud españoles, que están más expuestos al virus. "Tampoco olvidaré que somos el país con más sanitarios contagiados por número de habitantes, personas a las que lo de héroes a veces les suena chico debido a la humildad y naturalidad con la que desempeñan su labor".

Felices por el momento que les toca vivir, Feliciano y Sandra caminan juntos hacia una nueva normalidad, con la certeza de que terminarán 2020 siendo una familia de tres. Y, mientras tanto, esperan retomar de a poco el ritmo de sus vidas: ella en el mundo de la moda y en la organización de bodas (ámbito en el que comenzó a dar sus primeros pasos con la empresa de wedding planners Sophie Kors) y él, en las canchas de tenis.