Los juegos de mesa, el centro de las reuniones
Las nuevas propuestas se suman a las opciones tradicionales y son cada vez más requeridas por los fanáticos
Jorge se agachaba y saltaba, posaba en cuclillas y sacaba la lengua; por momentos se ponía de pie y los brazos le colgaban inertes mientras abría la boca repentinamente. En una esquina del sillón, Alberto y Sofía intentaban buscarles sentido a los gestos mientras gritaban: "saltar", "sapo", "rana", "marioneta". Los últimos granos del reloj de arena estaban por caer y en el living sólo se oían las carcajadas del resto de los jugadores hasta que un grito eufórico interrumpió: "¡La rana René!".
Fue un minuto de un juego que duró hora y media, la mímica de Jorge fue una de las tantas que el Cranium les llevó a realizar a él y a los once amigos que se reunieron esa noche para compartir pizzas y cervezas mientras disfrutaban de unos de los juegos de mesa más populares de la década.
Fue Sofía la que decidió llevar el Cranium que hace poco compró en Santiago de Chile, un juego cuya popularidad provoca furor y en el que convergen aproximadamente 14 juegos de mesa, entre ellos, el Pictionary y el Carrera de Mente.
"A veces olvidamos lo mucho que te podés divertir en una mesa sentado con tus amigos, pensamos que los juegos son para chicos", dice Sofía, quien es parte de la gran cantidad de argentinos que salen en busca de un nuevo juego para llevar a su mesa. Aunque su más reciente hallazgo -el Cranium- no llegó todavía a la Argentina, puede encontrarse en países vecinos como Chile y Uruguay, o puede buscarse la versión nacional llamada Quien te Entiende.
Casa Zanzi es uno de los locales más frecuentados por quienes disfrutan de los juegos de mesa, ofrece opciones para los que se inclinan por los tradicionales y para los que buscan propuestas innovadoras.
Marcelo Carabajal, gerente del lugar, asegura que muchos heredaron ese gusto, pero que también existe una demanda de nuevos juegos, lo que provocó el surgimiento de muchos productos en la última década. Entre las propuestas recientes se encuentran los fabricados por Maldón, una empresa de "jugadores para jugadores". Este grupo de aficionados decidió compartir con el mundo sus ideas y fue así como nació El Erudito, un juego de preguntas y respuestas, en el que la temática sucumbe ante la forma en que están hechas las preguntas, que se dividen en cuatro categorías: Asociación, Secuencia, Aproximación y En Común. "Hicimos un juego que a nosotros nos gustaría jugar, que mezclara y resaltara cantidad y calidad", dice Candelaria Mantilla, representante de Maldón y una de las creadoras de El Erudito. Actualmente, la firma cuenta con siete juegos, tres de ellos infantiles y el resto para jóvenes y adultos. Entre ellos, El Melómano, un reto para los amantes de la música. "Es uno de los juegos que la gente más busca porque plantea interacción y dinamismo; cantás y demostrás cuánto sabés de música en español", dice Carabajal.
Santiago, Rosario, Pilar y María mostraron sus cualidades musicales y conocimiento de artistas durante varias rondas del Melómano, tratando de entonar temas y demostrar conocimiento sobre el rock nacional. "Es un juego que trae 600 fichas, eso son 600 canciones y 2400 preguntas. Lo hicimos porque nos gusta la música y disfrutamos viendo a otros intentando cantar esos temas que marcaron a tantas generaciones argentinas", dice Mantilla.
La representante de Maldón y el gerente de Casa Zanzi coinciden en que una gran mayoría de las personas que buscan juegos de mesa disfrutan de aquellos que ofrecen interacción, disfrute y un reto a su conocimiento, su agilidad mental y su creatividad. "Existen públicos variados, pero sin duda son muchos los que prefieren juegos para expresarse o integrarse con el grupo; por eso la popularidad de juegos como éstos, por encima de algunos tradicionales; sin embargo hay gente que aún disfruta el placer del ajedrez, las damas o el Tag", dice Carabajal.
Una de las consignas que acompañan a cada uno de los juegos realizados por Mantilla y sus compañeros es "que vuelvan los juegos de mesa". Los creadores de El Memorioso ofrecen juegos innovadores y de detalles prolijos para que la gente no use las computadoras y los videojuegos. "Necesitamos que la gente socialice, no hay nada más lindo que jugar con otros y poder divertirse", dice la representante de Maldón.
La empresa ya tiene preparados dos juegos que se estrenarán muy pronto. Uno es el Switcher, que llegará en un par de semanas al mercado y será su primer juego de estrategia. El otro es El Cinéfilo, que saldrá al mercado en dos meses y se basará en la dinámica del Melómano con datos del séptimo arte. "Lo más interesante de la idea de jugar es quitarte el prejuicio que asocia el juego con la pérdida de tiempo, es sano y divertido; reír es vivir", dice Candelaria.