Alberto Fernández viajará a la asunción de Lula el 1° de enero y el brasileño vendrá 23 días después

El presidente Alberto Fernández viajará el 1° de enero para la asunción de Luiz Inácio “Lula” da Silva, en Brasilia. Fernández y el brasileño tienen muy buena relación y fue precisamente el exmandatario del país vecino quien convocó al argentino a fin de octubre pasado para que lo visite al día siguiente del balotage en el que se impuso sobre el actual mandatario, Jair Bolsonaro. Si bien en principio se barajó la posibilidad de que Fernández viajara la noche del 31 de diciembre, dado que la asunción estaba prevista para la mañana temprano del 1°, tras un cambio en el cronograma dispuesto por Brasil, todo indica que el argentino y su comitiva viajarán temprano a la mañana del primer día del año.

El cambio decidido en Brasil busca conseguir que más presencias internacionales puedan asistir a la asunción de Lula, que volverá al poder tras haberlo dejado en 2011 y haber sido sometido a un proceso judicial e incluso haber estado detenido. Si eventualmente se dejaba como estaba planeado, para que comenzara temprano, se complicaba esas asistencias dados los festejos del fin de año.

El viaje se suma a la agenda internacional que Fernández buscó cultivar en medio de la tensión interna que enfrenta en el plano político interno. El mandatario trabajó durante todo este año, en el que además detenta la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

El viaje de Fernández a Brasil aún está en elaboración, pero todo indica que, de mantenerse las previsiones saldrá temprano el 1° para asistir al primero de los eventos en Brasilia, previsto para las 13:30 de ese día. La jornada incluye varias actividades, la última de las cuales comienza a las 20:30, por lo que el mandatario podría hacer noche en la capital del país vecino, aunque aún no está definido.

Fernández tiene la posibilidad de hospedarse en la residencia del embajador en esa ciudad, Daniel Scioli, quien seguirá en el cargo, luego de haber trazado buenas relaciones con Bolsonaro y mantener un excelente lazo con Da Silva.

Aunque todavía no está confirmada la comitiva que acompañará al mandatario, todo indica que estaría compuesta por su círculo más cercano, que habitualmente lo acompaña en sus periplos: la primera dama Fabiola Yáñez; el secretario general de Presidencia, Julio Vitobello; el canciller Santiago Cafiero y la portavoz, Gabriela Cerruti.

El viaje cerraría el año en que Fernández puso especial hincapié en su agenda internacional con gira por China, Rusia, Europa (Francia, España y Alemania, en mayo), la Cumbre de las Américas en Los Ángeles, a comienzos de junio pasado; la del G-7 en Múnich, Alemania, a fines de ese mes; la asistencia a la Asamblea General de la ONU, en Nueva York en septiembre y luego su paso por París y Bali, hace diez días. En esta última parada fue que Fernández enfrentó problemas de salud, con un pico de hipotensión y el posterior diagnóstico de una gastritis erosiva con signos de sangrado, que lo tuvo varias horas en un hospital local haciéndose estudios correspondientes. También estaba planeado un viaje a México para finales de esta semana, que fue suspendido por el mandatario., luego de la cancelación del evento sobre la Alianza del Pacífico, del que iba a participar como invitado.

Aliados

Asimismo, se conoció hoy que Lula visitará la Argentina el 24 de enero, en su primer viaje al exterior como Presidente.

Fernández y Lula se conocen y tienen buena relación desde la época en que el brasileño era presidente y el argentino, jefe de Gabinete de Néstor Kirchner. En el entorno del mandatario recuerdan además que Fernández lo fue a ver a Lula cuando este enfrentaba problemas judiciales, lejos del escenario electoral que hoy lo beneficia. El buen vínculo también se vio el año pasado, en diciembre, cuando el brasilero vino a Buenos Aires para festejar los 38 años del retorno a la democracia, y participó de un acto en el Museo del Bicentenario primero y en un escenario sobre la Plaza de Mayo después.

Brasil, además, es el principal socio comercial de Argentina, además de que ambos países forman parte del Mercosur. Por otro lado, Argentina tiene en vistas poder incorporarse al BRICS (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica), en el cual el país vecino tiene un rol central.

Políticamente, además, en el Gobierno se celebró la elección de Lula, no solo por lo que consideraron el impacto en sí mismo para ese país, sino también “para la región”.

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