Asumió en Río Cuarto un gobierno "multicolor"

CORDOBA.- Antonio Benigno Rins, uno de los dirigentes que alimenta las esperanzas de recuperación del radicalismo cordobés, debutó en la intendencia de la ciudad de Río Cuarto con un gabinete que enseguida llamó la atención por su carácter pluripartidario, pues figuran radicales -como era obvio-, "juecistas" -seguidores del intentende Luis Juez, aliado para la elección local-, socialistas y también un representante de Recrear, el partido de Ricardo López Murphy.

Hace menos de un mes, Rins le arrebató la intendencia al justicialista Alberto Cantero, que era apoyado por el gobernador José Manuel de la Sota y por el presidente Néstor Kirchner. Río Cuarto es la segunda ciudad de la provincia, con 170.000 habitantes, y también su capital alternativa.

El flamante intendente prestó juramento el viernes y ayer tuvo su primer día de trabajo en el palacio municipal, asistido por ese llamativo elenco: José Lago, radical, en la cartera de Gobierno; Héctor Polinoro, radical, en Gestión; Daniel Reilobo, del partido del intendente de Córdoba, Juez; Roberto Cantoro, socialista, en Obras Públicas; Roberto Birri, socialista, en Desarrollo Humano, y Guillermo Mana, de Recrear, en Desarrollo Económico.

No obstante lo llamativo de ese gabinete "multicolor", Rins se rehúsa a atribuirle intenciones más allá de los límites políticos y administrativos riocuartenses.

Cuando LA NACION lo consultó al respecto, primero bromeó: "Y? será por aquello de que no hay peor astilla que la del mismo palo: por eso ensayamos astillas de palos distintos". Pero luego se puso serio y argumentó: "Lo nuestro es muy local; no pretendemos ser ejemplo de nada".

Viejas afinidades

Señaló, además, que con varios de sus actuales colaboradores inmediatos hace muchos años que tiene afinidades y un compromiso con Río Cuarto que han cultivo juntos, en algunos casos, desde 1983.

"De modo que lo único en que nos hemos fijado es que este conjunto de funcionarios sea fundamentalmente bueno para Río Cuarto", insistió el intendente.

Rins ganó la elección marcando algunas diferencias importantes con la gestión de su antecesor, a quien entre otras cosas se reprochaba haber sido "muy cerrado".

De la Sota se ocupó personalmente de la campaña poniendo todo su peso político para compensar las desventajas que ofrecía su candidato. El radical ganó la elección apenas por dos puntos y medio.

Ayer, Rins mantuvo una conversación de una hora con una delegación que reunía a distintas vertientes del justicialismo riocuartense. Una manera más de distinguirse de Cantero, que en sus cuatro años de gestión nunca recibió a la oposición.

La experiencia riocuartense ha despertado conjeturas acerca de alianzas de mayores pretensiones geográficas, tanto para el 2005 -elecciones legislativas nacionales- o para el 2007, en que deberá renovarse la gobernación.

La dirigencia provincial del radicalismo y del juecismo niegan por ahora que le interesen esas especulaciones.

Por lo pronto, lo cierto es Rins es uno de los dirigentes cuya figura comienza a mirarse con atención para dentro de tres años.