
Denuncian una maniobra para importar autos de alta gama como si fueran clásicos
La presentación la hizo Poder Ciudadano, que corroboró, por ejemplo, que un Porsche 2025 ingresó como uno de 1964; en la denuncia está mencionado Javier Cardini, el novio de Ornella Calvete, que era funcionario de Economía hasta el escándalo de la Andis
6 minutos de lectura'


La organización Poder Ciudadano denunció una maniobra que permitió que autos de alta gama ingresaran al país como si fueran autos clásicos, pagando menos impuestos.
En la denuncia está mencionado el novio de Ornella Cavete, Javier Cardini, que era subsecretario de Gestión Productiva del Ministerio de Economía, unidad donde se tramitó el expediente que cambió las reglas para el ingreso de autos clásicos. Cardini dejó el ministerio después de que apareció vinculado al caso de la defraudación en la Andis. El suegro de Cardini, Miguel Ángel Calvete, fue indagado, acusado de haber liderado una asociación ilícita que se infiltró en Discapacidad para hacer negocios a costa del Estado.
La denuncia por la presunta estafa al Estado con la importación de autos se presentó en la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA).

Poder Ciudadano tomó el caso porque recibió una denuncia anónima que describía una presunta operatoria que se estaba realizando gracias a un cambio en las normas para la importación de vehículos de colección.
Como parte del proceso de simplificación administrativa promovido por el Gobierno, se cambió una norma destinada a la importación de autos clásicos.
El Régimen de Importación de Autos Clásicos (VAC) está regulado por el Decreto 110/1999, que prohíbe, como regla general, su nacionalización, salvo excepciones expresamente previstas. Una de ellas contempla a los vehículos que tengan más de 30 años de antigüedad y un valor FOB no inferior a US$12.000, al ser considerados “de interés histórico y cultural para la Nación”.
Una resolución de la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía, de 2023, incluía la necesidad de una tasación del Tribunal de Tasaciones de la Nación. Pero este año, se aprobó la resolución 24/2025, que eliminó la exigencia de la tasación oficial, que funcionaba como un “control técnico” para evitar subvaluaciones o declaraciones incompatibles con el valor real de mercado.
Esta resolución es del 24 de febrero de 2025. El 29 de julio de 2025, el Ministerio de Economía dictó la Resolución 300/25, a través de la Secretaria de Industria y Comercio. Allí modificó nuevamente el régimen de importación de vehículos de colección o de interés histórico.
La nueva norma sustituyó varios artículos y anexos de la normativa anterior con el objetivo declarado de hacer más ágil el régimen y eliminar barreras innecesarias.
La tramitación del proyecto de Resolución 300/25 se llevó adelante mediante el expediente EX-2025-73170407-APN-DGDMDP#MEC, en el que habría intervenido la subsecretaría de Gestión Productiva, cuyo titular en aquel entonces era Javier Ignacio Cardini, “quien habría sido asociado en causas penales en curso por presuntas actividades irregulares, de público conocimiento”, dice la denuncia.
Tanto el suegro como la pareja de Cardini, Ornella Calvete, fueron indagados en el caso de la Andis. A ella le encontraron más de 700.000 dólares en su departamento y conversaciones donde se mencionaban supuestas operaciones cartelizadas con medicamentos para discapacitados.
El nuevo sistema
Ahora, el mecanismo para traer un auto clásico se basa en la declaración jurada del valor informado por el importador y en formularios que deben presentarse declarando, por ejemplo, la historia del vehículo.
Este cambio normativo, presentado oficialmente como una medida de simplificación administrativa, permite gestionar on line, por la plataforma de Trámites a Distancia del Estado, el Certificado de Importación de Vehículos Automotores Clásicos (Civac).
Se suprime la declaración jurada del propietario anterior en el país de origen, se reduce la carga fiscal y se establece una evaluación más rápida.
Dentro de los diez días corridos se resuelve la solicitud y, en caso de aprobación, la autorización se comunica a la Aduana mediante un sistema informático. Se redujeron, así, los controles.
“En los hechos, pudo haber habilitado la utilización del régimen para introducir vehículos modernos de alta gama bajo la apariencia documental de vehículos clásicos, generando beneficios impositivos y registrales de manera indebida”, dice la denuncia.
Los investigadores probaron que diversos vehículos modernos de alta gama habrían sido importados y registrados como “vehículos automotores clásicos”. Se usó, por ejemplo, documentación que declaraba falsamente un Porsche 911 de 1964 y un Aston Martin DB4 de 1961, para traer, en realidad, un Porsche 911 Turbo 50 Years Edition y un Aston Martin Vantage F1 Edition.
Lo mismo ocurrió con un Bentley declarado como de 1963 que era, en realidad, un Bentley Cabrio 2010.
Así, en los registros de la Administración Gubernamental de Ingresos Públicos (AGIP), las patentes generadas declaran un auto clásico, pero en realidad se trata de vehículos modernos.
Es lo que ocurrió con la patente AH054BA (aparece declarado un Aston Martin DB4 de 1961 y en realidad correspondería a un Vantage F1 Edition) o con la AH069CD (está declarado un Bentley 1963, pero correspondería a un Bentley Cabrio moderno).
Cinco de los vehículos detectados como irregularmente declarados pertenecerían a un mismo grupo familiar, menciona la denuncia. “Lo que podría indicar una modalidad sistemática para utilizar el régimen de importación especial de forma irregular con el fin de obtener reducciones tributarias sustanciales”.
Se registraron con este mecanismo autos de las marcas Maserati, Ferrai, Range Rover y Corvete, que no aparecen registrados en AGIP como que paguen patente.
“Para que la maniobra resulte viable habría sido imprescindible la intervención —por acción u omisión— de personal de la Dirección General de Aduanas y/o de áreas del Ministerio de Economía vinculadas a la tramitación de los Certificados de Importación de Vehículos Automotores Clásicos (Civac), dice la denuncia“.
La presentación de Poder Ciudadano habla de distintos posibles delitos de corrupción, como la defraudación al Estado Nacional y la falsificación documental.
Además, si los beneficios obtenidos mediante esta maniobra se incorporan o se disimulan dentro del sistema económico, existirían indicios de lavado de activos que justificarían, de considerarse pertinente, la intervención conjunta de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac).
De las consultas efectuadas en AGIP Rentas surgió que determinados dominios aparecen inscriptos con modelos antiguos, sin que ello refleje el verdadero modelo del vehículo, y que otros, directamente no figuran registrados, lo que resulta compatible con vehículos que no tributan patente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En ningún caso la información brindada por AGIP permite inferir que los vehículos serían efectivamente clásicos, “lo que refuerza la sospecha de que se habría utilizado documentación falsa o inexacta para su registración”, sostiene Poder Ciudadano.





