Denunciarán a tres senadores ante la Justicia por extorsión
El candidato a senador por Tucumán, Pablo Walter (Fuerza Republicana), denunciará mañana por extorsión a dos senadores del PJ y a un radical. Los acusa de frenar su ingreso en el Senado con el objetivo de obligar a su partido a que apoye la reelección del gobernador justicialista Julio Miranda en la Legislatura tucumana.
Walter señala como responsables de esta maniobra a los jefes de bloque del PJ, José Luis Gioja (San Juan), y de la UCR, Jorge Agúndez, así como al senador tucumano José Carbonell (PJ) y al propio Miranda.
La imputación contra los justicialistas, de demorar su consagración como senador, se basa en una confesión que le habría realizado Gioja, en privado, en la que le comunicó que su futuro estaba supeditado a que aceptara las exigencias de Miranda; al senador radical, en tanto, lo sindica como "cómplice" y como "parte de la corporación".
Hace más de un año que Walter batalla por obtener un lugar en la Cámara alta. La banca que, según él, le correspondería es la que dejó vacante el fallecido senador Carlos Almirón, también de Fuerza Republicana. Pero hasta ahora ni el PJ ni la UCR parecen dispuestos a hacerle un lugar en el recinto, ya que demoran la aprobación de su diploma.
Al cabo de un derrotero por varios despachos, hace dos semanas, Walter se quejó de esta situación ante el nuevo presidente del bloque del PJ. En una conversación que ambos mantuvieron en el Salón Rosado, Gioja le habría advertido sin tapujos que "su tema estaba trabado mientras no arreglara con Miranda aquello que él sabía", relató a La Nación el dirigente bussista. Los senadores del PJ Ramón "Palito" Ortega (Tucumán) y Horacio Zalazar (Chaco) habrían sido testigos de estas palabras. Al parecer, Gioja se refería a dos leyes que le quitan el sueño al mandatario provincial y que están demoradas en la Legislatura porque el PJ no tiene número suficiente para imponerlas, ya que carece de los dos tercios de los votos.
Una de ellas es económica y la otra es la reforma de la Constitución provincial, cuya finalidad es habilitar al gobernador del PJpara un nuevo mandato, que ahora le está vedado.
Los 12 diputados provinciales que corresponden a Fuerza Republicana -sobre un total de 40 miembros de la Legislatura- se oponen a apoyar estas iniciativas, lo que según la interpretación de Walter llevó al peronismo a intentar disuadir a esa fuerza por cualquier método.
En sintonía
En el bloque del PJ admiten que hubo un acuerdo previo con Miranda para resquebrajar la resistencia de los diputados bussistas.
"Miranda está negociando porque hay algunas cosas para las que necesita el voto de ellos (Fuerza Republicana). El quiere cerrar un acuerdo antes. Esa es la verdad", aceptó ante La Nación un influyente senador del PJ.
Sus pronósticos no fueron del todo pesimistas para la resolución de este conflicto. "Esto seguro se va a destrabar -agregó-. Nosotros estamos de acuerdo en que ese lugar es de Fuerza Republicana."
Walter difundirá mañana más detalles sobre esta denuncia por extorsión, que realizará ante la Justicia, aprovechando la visita del bloque justicialista a Tucumán para festejar el primer aniversario del gobierno de Miranda. "Quiere darles la bienvenida a la provincia", ironizan en su entorno.
Las recriminaciones a los radicales pasan más por su inacción que por su acción. La Legislatura tucumana había elegido para ocupar esa banca al radical Miguel Mibelli, que recibió un tácito apoyo de Miranda.
En un principio, los senadores de la UCR -en especial el ex jefe de bloque José Genoud (Mendoza)- se entusiasmaron con esa designación. Aunque la amenaza de un escándalo similar al de los senadores "truchos", que tanto combatió la Alianza, los obligó a desestimarla para no quedar atrapados en su propio discurso.
Walter reconoce que, ante la opinión pública, es difícil defender su situación. "Yo digo que soy de Fuerza Republicana y eso en la Capital no cae bien. Pero éste es un lugar que nos pertenece", se lo escuchó decir. El dirigente tuvo que desafiar las aspiraciones del general (R) Antonio Bussi, que también quería la banca y que pertenece a otra línea interna.
El miércoles último, los senadores habían votado favorablemente un dictamen de la Comisión de Asuntos Constitucionales, que preside el menemista Jorge Yoma (La Rioja), para rechazar el pliego de Mibelli y que la Legislatura vuelva a elegir a un postulante. Sin embargo, un imprevisto pedido de Gioja para reconsiderar la votación hizo que el dictamen fuera devuelto a la comisión. Todos avalaron esta rápida decisión.
"Nadie entendió por qué cambiaron de opinión en medio de la sesión cuando el dictamen había sido firmado por unanimidad", protestó Walter.
Según la denuncia que realizará este dirigente, un senador radical también le admitió que había un pacto entre su partido y el PJ para no tratar el tema. Agúndez se habría negado a recibirlo en su despacho.
"La corporación sigue jugando sus propios intereses -se quejó Walter-. Es increíble que estén trabando mi ingreso los mismos senadores que sostienen a (Emilio) Cantarero y a (Jorge) Massat."
Los sospechosos
José Luis Gioja - PJ
El candidato a senador Pablo Walter reveló que Gioja le había dicho que su ingreso en el Senado "estaba trabado mientras no arreglara con Miranda" la sanción de dos leyes en la Legislatura tucumana.
Julio Miranda - PJ
El gobernador tucumano aspira a obtener la reelección en su cargo, para lo cual necesita el apoyo de los legisladores de Fuerza Republicana que, por el momento, se resisten a atender sus aspiraciones políticas.
Jorge Agúndez - UCR
Walter acusó al jefe del bloque de la UCR de formar parte de la "corporación del Senado" y de no haberlo recibido en su despacho para escuchar sus reclamos. Dijo que había hecho un acuerdo con el PJ.
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