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Oviedo analiza emigrar a Bolivia
Si el gobierno del presidente electo, Fernando de la Rúa, no se mueve rápidamente con Brasil, los Estados Unidos y el Paraguay, el ex general paraguayo Lino Oviedo, asilado en la Argentina desde marzo último, podría permanecer en el país hasta mucho después del 10 del mes próximo y transformarse en un dolor de cabeza para el nuevo gobierno.
Ya hubo contactos con los abogados de Oviedo, que dijeron que el ex general optaría por mudarse a Bolivia, un país del que podría pasar al Paraguay.
Esta será la primera prueba para el futuro canciller, Adalberto Rodríguez Giavarini.
Ayer, los futuros ministros de Justicia y de Interior, Ricardo Gil Lavedra y Federico Storani, respectivamente, coincidieron en señalar que Oviedo debería buscarse otro país para establecer su domicilio, o correr el riesgo de ser detenido en la Argentina y, luego, extraditado.
Oviedo está acusado en Asunción de ser el autor intelectual del asesinato del ex vicepresidente Luis María Argaña y de la muerte de siete jóvenes.
A pedido del juez de esa ciudad Jorge Bogarín, Paraguay solicitó a nuestro país su extradición el 4 de agosto último, la que fue rechazada por el presidente Carlos Menem un mes después, sin dar intervención del pedido a la Justicia.
Gil Lavedra volvió ayer a hablar sobre el tema y, tal como anticipó La Nación , aseguró que "se está buscando que Oviedo pueda ser recibido por otro país. Pero si el Paraguay llega a solicitar nuevamente su extradición, ésta será sometida inmediatamente a la Justicia".
La Alianza quiere enviar un triple mensaje:al Paraguay, para recomponer las relaciones bilaterales; a la sociedad, para indicar que el próximo gobierno no está dispuesto a continuar con el asilo, y a Oviedo, para indicarle que su permanencia en la Argentina se vuelve peligrosa.
Tres ideas en carpeta
Existen tres soluciones posibles que se estudian en estos días:
- Si apenas se produce el recambio presidencial se recibe un nuevo pedido de extradición de Paraguay, el entonces presidente, Fernando de la Rúa, podría indicar a su ministro del Interior que revoque automáticamente el asilo a Oviedo y lo expulse.
Si bien esa determinación depende de una solución política, varios referentes de la coalición dijeron en reiteradas oportunidades que enviarían ese pedido a la Justicia.
- Si, en cambio, la Alianza cumple con sus palabras y remite ese pedido a los tribunales, Oviedo debería permanecer en nuestro país quizá más de un año a disposición de la justicia federal y podría quedar detenido.
- Por eso, algunos consideran que la mejor solución es buscar el éxito en una mesa de negociaciones, por medio de conversaciones con Brasil, los Estados Unidos y Paraguay, de modo que Oviedo decida "por sí mismo y antes del 10 de diciembre", con la aceptación de esos Estados, trasladarse a una tercera nación.
Este esquema es propiciado por el diputado Marcelo Stubrin, miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados; por el futuro jefe de Gabinete, Rodolfo Terragno, y por Rodríguez Giavarini.
Por Adrián Ventura
