Sin fondos, hace agua la Escuela Nacional de Náutica
Director: su complicada situación financiera puso a esta institución civil bajo el estricto control de un hombre de la Armada.
1 minuto de lectura'
En plena lucha por conseguir fondos para sostener su actividad, la Escuela Nacional de Náutica -con casi 200 años-, creada por el general Manuel Belgrano, sólo suma derrotas. Por ello, a pesar de ser el único centro de formación de marinos mercantes en el país, desde hace algún tiempo funciona debajo de la línea de flotación.
El Poder Ejecutivo nacional vetó un presupuesto de 3 millones de pesos que las dos Cámaras del Congreso nacional habían aprobado el año último para reequiparla y darle oxígeno en su ahogo financiero. Pero a ese traspié le sucedió el cambio de conducción decidido por la Armada que, descontenta con el manejo político que se daba a la crisis en la institución, intervino colocando un militar en reemplazo de un marino mercante que tradicionalmente la dirige.
El capitán Héctor Kajim, un egresado de la Escuela Naval Militar, quedó al frente de la ENN, a pesar de que se trata de un instituto de formación civil.
Al parecer, según fuentes de la institución, el saliente capitán Eduardo Sulín, un marino mercante con 14 años de experiencia pedagógica, no había recibido todo el apoyo esperado en su intento por renovar la Escuela Nacional de Náutica y en las gestiones encaradas ante el Parlamento nacional.
"La Armada, advirtiendo que el tema adquiría un tinte político, optó por dar un golpe de timón y colocó una conducción militar" se quejan hoy, nada conformes, algunos docentes de la institución. "El problema no es la conducción de la Escuela, sino cómo hacemos para seguir instruyendo si casi no tenemos medios, sin buques, y sin simuladores de navegación", aclaran.
La Escuela Nacional de Náutica es el único centro educativo que ofrece la carrera de marina mercante en el país, y si bien integra el esquema de educación pública del Estado nacional, desde hace algún tiempo y a causa de sus problemas financieros, dejó de ser gratuita.
"Los cadetes subvencionan los gastos con el pago de una cuota, pero les cuesta mucho cumplir con ese aporte porque no pueden trabajar. El sistema de estudios los obliga a tener todo el día disponible para las actividades, las guardias, y los embarques", explicó a La Nación , Lilian Mera, titular del Centro Argentino de Estudios Estratégicos Nacionales (Cadena). "Antes era gratis, e incluso los mejores calificados recibían un pequeño sueldo como ayuda", recordó.
Los cadetes abonan un arancel mensual de $ 288, si revistan en calidad de internados por residir a más de 60 kilómetros de Buenos Aires. Si acuden diariamente hasta las 18, el pago llega a los $ 178. Además, abonan por separado los apuntes necesarios para sus estudios, y deben adquirir los uniformes de uso obligatorio interno y externo; para invierno y verano.
La Escuela Nacional de Náutica depende de la Secretaría de Transporte de la Nación, pero es administrada por el Ministerio de Defensa, mediante la Dirección de Instrucción Naval de la Armada.
Ajuste
Según un informe elaborado por ese organismo naval, que dirige el almirante Alvaro Vázquez (al que accedió La Nación ), la Armada dispuso para los establecimientos educativos "estudiar las reducciones posibles en las plantas docentes, efectuar los reemplazos factibles por personal militar en actividad, y tramitar el cese por jubilación de todo el personal civil y militar que esté en condiciones de hacerlo".
Las fuentes navales consultadas admitieron que "se realizó un profundo ajuste en la Escuela Nacional de Náutica, al igual que en otras instituciones educativas de la Armada", pero rechazaron que se intente un mayor control militar sobre esta institución.
En 1996 se decidió reducir el total de horas-clase en un 32%, y a ello se sumaron achicamientos paulatinos de gasto, congelamiento de vacantes y jubilaciones forzosas.
En 1994 fue vendido, por decisión del Ministerio de Defensa, el buque "Piloto Alsina", que se utilizaba para instrucción en la Escuela Nacional de Náutica.
Actualmente se utiliza para la instrucción el velero "Tijuca" donado por un marino mercante. Tiene 18 metros de largo, con casco de acero y una capacidad de alrededor de 10 cadetes por viaje, aunque hay otras embarcaciones menores.
"La Escuela Nacional de Náutica fue declarada sede de la Organización Marítima Mundial para Sudamérica y rama regional de la Universidad Marítima Internacional, en reconocimiento al prestigio obtenido por la calidad de sus egresados", dijo a La Nación uno de sus profesores, que pidió mantener el anonimato para evitar sanciones, ya que el personal docente de la institución debe adecuarse a las disposiciones militares de la Armada.
Quienes se encargan de formar a los marinos mercantes no entienden "por qué se descuida este sector".
Y no encuentran respuesta, más si se tiene en cuenta que, quienes mantienen a flote los barcos de transporte, llevan por mar el 95 por ciento de lo que vende el país.





