Con Dujovne, Macri se ha replegado sobre su posición más ortodoxa

A continuación, sus principales conceptos:

• El Presidente decidió remodelar el Gabinete; tomó una decisión que muchos demandaban desde el comienzo de su gestión, que es, en el marco de un gran desaguisado económico como el que él heredó, concentrar las decisiones económicas y lograr que alguien (y esta es la clave del problema) se convierta en una especie de médico general
• En el caso de la política económica de Mauricio Macri había una tendencia hasta ahora que, aparetenemente, él piensa subsanar nombrando a Nicolás Dujovne como coordinador de todas las áreas que tiene que ver con economía. Esa tendencia era que cada uno daba lo mejor de sí mismo, es decir, el ministro de Energía tenía que subir las tarifas todo lo que podía; el ministro de Hacienda, bajar el déficit todo lo que podía; el ministro de Finanzas conseguir el financiamiento como sea
• En este sistema donde cada uno da lo mejor de sí puede que la orquesta suene hasta hacer sangrar los oídos
• La función de Nicolás Dujovne ahora es, entre otras, mirar el equilibrio general de la política económica. Además, es el ministro que va a tener que controlar en todas estas áreas la naturaleza del ajuste fiscal
• Macri se ha replegado sobre su posición más ortodoxa y cree que el centro de su gestión tiene que estar en resolver el problema del déficit , esto es lo que le encomienda a Dujovne subordinándole algunos ministerios importantes

• ¿Se podría haber hecho un ministerio de Economía? Sí, pero Macri decidió no hacerlo para no herir las susceptibilidades de algunos ministros; dicen que, sobre todo, del ministro de Finanzas Luis Caputo
• Ahora, como siempre sucede en política, la función hace al órgano, es decir, no sólo Dujovne está al frente de una tarea de mayor coordinación y de mayor poder, sino que esto se debe a que tiene que haber una única voz hablando con el Fondo Monetario Internacional
• Hay otro detalle en todo esto, y es que se sustrae un poco la política económica del área de la Jefatura de Gabinete, sobre todo al área de Mario Quintana, que tenía un conflicto muy fuerte con Federico Sturzenegger de carácter conceptual, sobre cómo debe desarrollarse la política monetaria
• Ahora, el presidente del Banco Central tendrá que coordinar con Dujovne, con quien tal vez en términos personales se entiende mejor, lo que no quiere decir que la situación de Sturzenegger esté totalmente saldada
• La función es realizar un ajuste fiscal; el Gobierno enfatiza mucho este aspecto de la crisis económica
• ¿Por dónde va a pasar el ajuste? Algunos dicen que no es tan difícil porque como va a haber más inflación , la inflación licúa el gasto y, con la misma política fiscal, con más inflación el Gobierno podría mejorar su perfil de déficit
• Mauricio Macri está pensando en los gobernadores y en las provincias: dice que acá se debe hacer el ajuste entre todos o no hay ajustes.

• Una tercera de vía de acceso al panorama fiscal tiene que ver con si el Gobierno va a dar la posibilidad de armar una gran discusión política sobre el esquema fiscal de la Argentina, lo que sería nuestro pacto fiscal como sociedad: qué cosas queremos sostener y cómo lo hacemos
• Nadie habla en la Argentina sobre los subsidios que reciben muchos sectores empresariales. En Brasil los llaman "bolsa empresaria", como si hubiese un Plan Trabajar para empresarios
• Aquí tenemos sectores completos, entre ellos, el más obvio, la industria electrónica, a la que pertenece el socio del presidente Nicolás Caputo. Y, así, muchos otros, que fueron sometidos a discusión cuando se debatió la reforma tributaria que se aprobó en diciembre y después nunca más se habló
• ¿Va a haber una discusión política sobre toda la estrategia fiscal en la Argentina? ¿O hay un presupuesto enyesado y van a poder tocar cuestiones marginales solamente? En este momento, donde el Presidente quiere poner el déficit fiscal en el centro de la escena es una pregunta política muy importante sobre el nivel de transparencia que va a tener el gasto en la Argentina, ¿a qué destinamos los recursos?
• La discusión con las provincias va a ser difícil, hasta por un problema de timing: el problema quiere pasar toda esa discusión al presupuesto nacional, que se va a empezar a discutir después de septiembre, pero el acuerdo con el Fondo hay que sellarlo ahora; quiere decir que Nicolás Dujovne va a tener que ir a ver a Christine Lagarde con un sistema de números todavía no consolidado con las provincias
• Hay otro capítulo de la crisis argentina que tiene que ver con el sector externo: el Gobierno tiene menos percepción de esta cuestión. Algunos economistas la vienen sosteniendo y dicen que hay un problema de déficit de cuenta corriente, lo que quiere decir que a la economía en su conjunto le faltan dólares

• Esto es importante porque si hay un problema de financiamiento en los mercados emergentes, es decir, si la crisis que conocimos el 25 de abril no terminó y empieza a haber una restricción de financiamiento, la Argentina es un blanco porque es un país que tiene más de cinco puntos de déficit de cuenta corriente, y porque está muy endeudada en moneda extranjera
• Entonces, si van a faltar dólares, los inversores, es decir, bancos de inversión y grandes fondos, empiezan a decir que acá hay que irse porque es un país vulnerable
• Este problema tiene que ver con la política monetaria y, sobre todo, con el Banco Central. Mauricio Macri respaldó a Sturzenegger –con algunos reproches que hizo en privado-. Esto tiene que ver con la discusión que viene
• Todo esto cambió los términos; las promesas del Presidente van a ser de más difícil cumplimiento, lo que quiere decir que va a haber más inflación de lo que se esperaba y, por consecuencia, que la idea de que durante de este mandato se iba a resolver el problema inflacionario es una idea que hay que dejar de lado
• El Gobierno va a priorizar mantener la actividad económica, mantener el nivel de crecimiento por encima de reducir la inflación, y aún ese objetivo principal de no ir a un gran ajuste va a ser controvertido por el efecto de la crisis del campo, es decir, va a haber meses recesivos
• Es otro Macri, es otro Cambiemos; habrá que ver si logra convencer a sus aliados y habrá que ver cómo mira el peronismo esta discusión
• El peronismo está en una encrucijada compleja: Cristina Kirchner, por supuesto, ve caer maná del cielo; ahora, el peronismo no kirchnerista está en un dilema complejo, que es cómo pararse frente a Macri y qué nivel de agresividad poner frente al Gobierno cuando las variables económicas están deteriorándose
• ¿Por qué? Nadie en el mundo de los gobernadores ni de los sindicatos quiere ser identificado como aquel que puso un palo en la rueda para convertirse en el culpable de la crisis
• Ahora, en la cabeza de estos peronistas, que empiezan a encontrarse en la sede del PJ, nace la fantasía de un posible ballotage, y de que Mauricio Macri no tiene del todo escriturada la reelección, algo que era impensable hace cuatro meses
• En este marco de restricción económica, que es un marco de restricción política, Macri tiene que mirar qué le entrega al Fondo y qué se reserva para sí; acá veremos una pelea central: la obra pública
• Aunque haya un recorte en la obra pública, para Macri, el cemento es una manera de ganarle al peronismo en la provincia de Buenos Aires, el gran campo de batalla sigue siendo el Conurbano
• El Gobierno cree, y probablemente cree bien que, si el peronismo no resuelve el problema bonaerense, el gobierno de Cambiemos todavía tiene chances de pensar en un futuro más promisorio, y el propio Macri puede imaginar la reelección

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