
Con decenas de emprendimentos en marcha e impulsado por la llegada de público joven, el barrio de Barracas está recuperando parte de su antiguo esplendor
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Barracas está cambiando. Aquel barrio que hasta hace unos años parecía olvidado por desarrolladores, inversores, funcionarios y hasta los mismos habitantes de la ciudad, hoy está viviendo una especie de renacimiento impensado. Y en cada calle se puede apreciar cómo la vieja fisonomía de casas bajas y grandes plantas industriales va dejando espacio a un barrio moderno y dinámico, en el que los nuevos emprendimientos de vivienda y oficinas, empresas y desarrollos de lujo conviven en armonía con las antiguas edificaciones de finales del siglo XIX y principios del XX.
Nuevos locales comerciales de los más diversos rubros, decenas de casonas recicladas, edificios de viejas fábricas cerradas que reviven de la mano de proyectos originales y un tránsito de gente y vehículos incesante, son algunos de los datos que hablan de este renacer del barrio, uno de los más antiguos y tradicionales de Buenos Aires y que en otras épocas supo ser uno de los más importantes de la ciudad.
"Indudablemente, Barracas es uno de los sectores que más crecimiento mostró en los últimos tiempos, y tras años de olvido hoy se muestra con una actividad sostenida. Es que es una zona con carácter y personalidad, con gran relevancia histórica y arquitectónica", dice Jorge Antúnez Vega, de la firma inmobiliaria que lleva su nombre.
A esto hay que sumarle que tiene una ubicación privilegiada, que se ve favorecida por sus múltiples accesos a las autopistas 25 de Mayo y Buenos Aires-La Plata, la facilidad que brinda la avenida 9 de Julio y la ventaja que da tener muy cerca un centro de transferencia de transporte como la estación Constitución, que está en proceso de total restauración y donde confluyen trenes, subtes e infinidad de líneas de colectivos.
"La falta de espacio en los barrios característicos, la expansión natural de Puerto Madero hacia el Sur, su excelente ubicación a escasos minutos del microcentro, su facilidad de acceso y sus innumerables medios de transporte son algunos de los puntos clave que llevaron a que tanto desarrolladores como inversores se empezaran a interesar por la zona", comenta Antúnez Vega.
María Reynolds, directora de Reynolds Propiedades, considera que a todo esto hay que sumarle que "este alto interés por la zona tiene que ver, por un lado, con que los valores son un poco más bajos que en otros barrios de la Capital como Palermo o Belgrano; por otro, porque está muy cerca de todo, y también porque hay mucha gente de la zona sur para la cual mudarse aquí es una forma de estar cerca de su barrio original, pero del lado de la Capital".
Como suele suceder con todo proceso de desarrollo, hay sectores a los que el despegue les llega antes. De ahí que no extrañe que la zona este del barrio, o sea la que linda con San Telmo y La Boca, y la que se encuentra más próxima al microcentro y a Puerto Madero, sea la que muestre más movimiento.
"Si bien hasta hace un tiempo la zona más buscada era la de los alrededores de la plaza Colombia, en la actualidad el área se fue extendiendo y hoy abarca la comprendida por las calles Ruiz Díaz, Finochietto, Hornos y California", comenta Isadora Beimorto, de la inmobiliaria local MKS Propiedades.
Antúnez Vega aclara: "Barracas siempre se consideró comolo que está en las avenidas Martín García y Montes de Oca, aunque todas las calles adyacentes, y el entorno del parque Lezama y la plaza Colombia son áreas sumamente buscadas".
En cuanto al público que se muda a la zona, los especialistas coinciden en su diversidad. "Desde personas que trabajan en las empresas del centro y Puerto Madero hasta profesionales, pasando por matrimonios y jóvenes que buscan su primera vivienda. Las razones de esta elección tienen que ver con que la zona sigue manteniendo la tranquilidad de los barrios al tiempo que tiene una ubicación inmejorable y a precios más accesibles que otras zonas capitalinas", comenta Beimorto. "Es gente joven, solos o en pareja, con o sin hijos, por lo cual todo esto augura un gran futuro para la zona. A estos se suman anticuarios, diseñadores, artistas, y empresarios que buscan áreas más distendidas", agrega Antúnez Vega.
Y es cierto que son los jóvenes los principales impulsores de este fenómeno, ya que en este barrio los precios resultan más accesibles. En promedio, el precio para propiedades usadas oscilan entre los 900 y 1200 dólares por metro cuadrado, mientras que para los nuevas o en construcción, se cotizan entre 1300 y 1600 dólares.
Los alquileres, en promedio, parten desde los 600 pesos para un dos ambientes, sobre alguna de las avenidas principales.
Confort y calidad
Uno de los emprendimientos importantes de la zona es Barracas Central. Este proyecto se desarrolla en el predio de la ex fábrica de Textil Piccaluga, en Lanín entre Feijóo e Icalma, y tiene un valor arquitectónico significativo que lo distingue en la zona. Los departamentos en Barracas Central tendrán una superficie de entre 50 a 150 m2, con precios que arrancan en los 750 dólares por metro cuadrado. El complejo, que contará con locales a la calle, ofrecerá muchos amenities, como, entre otros, solárium, pileta, microcine, cocheras, SUM y gimnasio.
Otra de las novedades de la zona es el proyecto denominado MOCA, que se está realizando en el predio que ocupó la firma Bagley, en la intersección de Montes de Oca y Finochietto. El emprendimiento se realiza sobre un predio de 50.000 metros cuadrados en el que se levantarán 250 departamentos de 1, 2, 3 y 4 dormitorios de entre 40 y 200 m2, y según sus realizadores, están dirigidos a un público ABC 1. El valor de las unidades arrancará en los 1250 dólares por metro cuadrado.
A éstos se suma Solares de Montes de Oca. Construido en el cruce de las avenidas Martín García y Montes de Oca, son dos torres de 30 pisos (una ya está finalizada y la otra lo estará en noviembre), con departamentos de 1, 2 y 3 ambientes. Estos edificios ofrecen mucho confort y servicios como spa, gimnasios, solárium, vestuario, salón de fiestas, terrazas con parrillas, pileta y kids club. En éstas, el costo del metro cuadrado promedia los 1100 dólares.
En tanto, uno de los predios que está en carpeta y cerca de una definición es el del edificio de la vieja editorial Kraft, en Montes de Oca entre Jovellanos e Isabel la Católica. Tras varias compras y ventas, se espera que en los próximos meses el solar cuente con un destino definitivo. En cuanto a los emprendimientos de índole comercial, uno de los más importantes es el reciclado de la ex fábrica Canale. Renombrada como Palacio Lezama, el edificio, en Martín García al 300, será la sede de la próxima realización de Casa FOA. Una vez finalizada la tradicional muestra de arquitectura y diseño, el lugar se transformará en un espacio de oficinas con locales comerciales y gastronómicos, algo que los nuevos residentes están empezando a reclamar cada vez más debido a la carencia de este tipo de espacios en la zona.




