Con los colores de El Overo Z7 UAE, los hijos mayores del los ex 10 de handicap avanzan con decisión en el alto handicap

Nacieron casi arriba de un caballo, con un taco y una bocha y admirando a sus padres, cracks del polo y ex 10 goles de handicap. Y hoy son ellos los protagonistas. Esta temporada, Cruz Heguy y “Lukin” Monteverde debutaron en el Abierto Argentino de Polo defendiendo los colores de El Overo Z7 UAE. Y volvieron a poner sus apellidos en el tablero de la Catedral.

En el caso de Cruz, tiene 20 años y es la cuarta generación de un apellido ilustre y muy querido en el ambiente polero. Su papá, Eduardo (más conocido como el “Ruso” Heguy) y su tío “Pepe”, se despidieron de Palermo en 2017, con Chapaleufú, por lo que la prensa especializada celebró la vuelta de un Heguy al Abierto tras seis años de ausencia.



En el caso de Lukin, que es el hijo mayor de Lucas Monteverde, tiene 17 años y una vasta carrera en el exterior. A los 13 ya había ganado la Copa de la Reina en Inglaterra: fue el jugador más joven en lograrlo (el año pasado la ganó el team que integraba Cruz). Amigos, teammates, con siete goles de handicap cada uno y una garra demoledora, ambos se lucen haciendo solos (pero con una gran hinchada familiar en palenques) su propio camino.

Otras noticias de Revista ¡HOLA!
¡Piedra libre! Tori Spelling, de su etapa más difícil a la ilusión de un nuevo amor: ¿quién es su novio y a qué se dedica?
Todas las fotos. Los personajes, las parejas, los looks y la emoción en la esperada final del Abierto de Polo de Palermo
De Hollywood a Cañuelas. Produjo un film ganador de dos premios Oscar, es amiga de Cambiaso y se instaló en Argentina por el polo
Más leídas de Revista ¡HOLA!
Carlos III. La temperatura del té, zapatos de 1971 y sus “dedos verdes”: 10 curiosidades que lo convierten en un rey singular
De Hollywood a Cañuelas. Produjo un film ganador de dos premios Oscar, es amiga de Cambiaso y se instaló en Argentina por el polo
Ricardo Piñeiro. Sus últimos anhelos, su conexión con la fe, la fotografía y las ganas de enamorarse
Eduardo y Elina Costantini. Posan por primera vez en su fabulosa casa de Punta del Este y nos revelan su deseo más profundo