Crimen del frigorífico: identificaron a dos sospechosos del caso María Caccone

María Caccone fue asesinada de un balazo en el cuello. La atacaron por 130.000 pesos. Ella no lo sabía, pero todo estuvo perfectamente planeado. A las 13.42, del 14 de marzo pasado, en Australia y avenida Arieta, en La Matanza, por donde la víctima pasaría en un remise 30 minutos después, Gabriel Mariano Franick, conocido como "El colo", se bajó del Fiat Uno gris que conducía Hernán Ariel Rearte, alias "El flaco". Franick caminó hasta encontrarse con el conductor de una moto, todavía sin identificar, con quien protagonizaría el brutal plan criminal. La banda tenía dos datos claves: el monto del botín y el lugar exacto por donde "su objetivo" iba a pasar camino a un sucursal del banco Comafi donde tenía que depositar el dinero del frigorífico para el que trabajaba.

Esa información se las había dado el único detenido de la causa. El conductor del vehículo que trasladaba a la víctima señalado como el entregador, Juan Marcelo Rearte, de 44 años y primo de "El flaco" Rearte. Su detención fue el 18 de marzo pasado, cuatro días después del homicidio de Caccone.

La Justicia pidió la captura nacional e internacional de Franick y Hernán Rearte. Los investigadores indicaron que los sospechosos buscados cuentan con frondosos antecedentes criminales y que tras su identificación lograron determinar el rol que cada uno tenía dentro de la banda.

Los pesquisas precisaron que Franick sería el autor material del crimen y Rearte el organizador y el "apoyo "de los dos motochorros: "El colo" y el otro sospechoso que todavía no fue identificado.

"El flaco", indicaron, se encontraba en un vehículo a una cuadra de la escena del hecho, listo para huir.

"El flaco" según dijeron los voceros, oriundo de La Tablada, tiene una carrera delincuencial de alto voltaje. Con 47 años cuenta con causas por robos, tenencia de armas y piratería del asfalto. Entró y salió de la cárcel varias veces. Se muestra en redes sociales como un feligrés de San La Muerte y el Gachito Gil.

"El colo" Franick, de 41 años, con domicilio en Parque Patricios tuvo una condena por diez años por robos. Había salido de la cárcel el 26 de junio del 2018.

La investigación del caso está a cargo del fiscal Claudio Fornaro, de la Unidad Funcional de Instrucción de Homicidios de La Matanza.

"Se está investigando intensamente para detener a los sospechosos e identificar a los otros partícipes", afirmó una fuente del caso.

El fatal hecho ocurrió el 14 de marzo pasado a rededor de las 14, en el cruce de Australia y avenida Ignacio Arieta, en pleno centro de San Justo, partido de La Matanza. Caccone, quien trabajaba desde hacía cuatro meses en un frigorífico, abordó el Renault Logan gris conducido por Juan Marcelo Rearte, de 44 años, primo de "El flaco", y actualmente detenido con prisión preventiva por ser el entregador. Iban a depositar 130.000 pesos de la empresa al banco Comafi de esa localidad, junto a su compañero de trabajo Marcos Fabián González, de 35 años.

Antes de llegar a la entidad bancaria, Franick junto a otro hombre arriba de una moto los interceptaron con intenciones de roborles el auto en el que Caccone viajaba y, según las fuentes, Franick se bajó de la moto armado, se acercó a la ventanilla del asiento del acompañante y, sin mediar palabra, efectuó un disparo que impactó en el cuello de la mujer.

El ladrón disparó una segunda vez e hirió al chofer Rearte en la cintura, tras lo cual tomó la cartera de la mujer, que contenía parte del dinero, y se escapó con su cómplice.

En aquel momento, González tomó 20.000 pesos que los delincuentes dejaron en el remise y se los ocultó en el pantalón antes de que llegará la policía. Los investigadores precisaron que, después de que arribaran los móviles policiales y las ambulancias a la escena de los hechos, González fue trasladado a un hospital de la zona.

Allí, en el centro de salud, González, que no tenía heridas de gravedad, se dirigió al baño e intentó acomodarse el dinero entre el pantalón y el calzoncillo para que nadie advirtiera que lo tenía. Como tardaba mucho en salir del baño, el personal policial llamó a la puerta. Cuando el empleado del frigorífico salió, los agentes inmediatamente notaron que había algo extraño en su conducta y lo trasladaron a la comisaría.

En la dependencia policial, al ser revisado, le encontraron el dinero. Según dijeron las fuentes consultadas, González dijo que "era el cumpleaños de su hijo" y que por eso necesitaba el dinero.