
Abuso
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Sobrevivió poco más de un año a un horror que fue incapaz de comprender. Pero su cuerpo dijo basta. La víctima, un niño de 2 años, murió en las últimas horas como consecuencia de las terribles lesiones que sufrió tras haber sido abusado sexualmente y golpeado en noviembre de 2019, cuando estaba en su casa de Alejandro Korn al cuidado de quien era su padrastro, único sospechoso del crimen y prófugo desde entonces.
El niño estaba internado en el Hospital de Niños de La Plata desde el 4 de noviembre del año pasado. Según informaron fuentes policiales a la agencia de noticias Télam, el menor murió a raíz de las lesiones que sufrió en el ataque sexual en la casa en la que él y su madre, Griselda, convivían con Rubén Oscar Pérez, de 40 años.
Según informó El Diario Sur, Pérez había estado preso por delitos de índole sexual y en el barrio Los Amigos, donde se desarrolló el drama, le temían.
El caso es investigado desde el principio por la fiscal Karina Guyot, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de San Vicente, que ahora, con la muerte del niño, cambió la carátula de la causa a "homicidio agravado y abuso sexual", con Pérez como único imputado.

El día del hecho, al regresar de hacer compras la madre del chico advirtió que su hijo no despertaba y que tampoco respiraba, por lo cual lo llevó de forma urgente al hospital Cecilia Grierson, de Guernica.
Los médicos constataron que el niño presentaba serias lesiones producto de un ataque sexual y una golpiza, por lo que fue derivado al Hospital de Niños de La Plata, donde quedó internado en terapia intensiva. Se activó el protocolo de casos con signos de criminalidad y se alertó a la policía.
Según declaró Griselda, inicialmente Pérez le dijo que lo que había ocurrido era "un accidente". Después le pidió que a los médicos del hospital de Guernica les dijera que lo había golpeado la niñera. Pero cuando a la madre del chico le comunicaron que su hijo presentaba signos de abuso sexual, su pareja ya se había esfumado. Desde entonces está prófugo.
La mujer afirmó que, desde la clandestinidad, Pérez le envió mensajes amenazantes a través de Facebook, que aportó a la Justicia.





