¿Quiénes son los dueños del yate narco decomisado en Nordelta?

Martín Asci y Paula Avanzi fueron detenidos en su casa en el country de Nordelta por ser presuntamente parte de la banda de narco VIP que la policía bonaerense desbarató ayer tras varios allanamientos.

Según informaron fuentes de la investigación, Asci y Avanzi son pareja hace tres años y se mudaron en 2018 al country situado en el partido de Tigre. Los investigadores precisaron que los novios son los dueños del yate que mantenían amarrado a su casa en el barrio cerrado. Además de ser los propietarios de la camioneta Range Rover Evoque y un auto BMW.

Las fuentes consultadas agregaron que la pareja disfrutaba de viajar a Miami a comprar ropa. "Gastaban mucho dinero en ropa. Tenían un placard de vestimenta gigante", precisó un investigador. A partir de los asiduos viajes a las playas estadounidenses, la pareja comenzó a adquirir modas de esa ciudad y, según relató el investigador con acceso al expediente, le quitaron la patente delantera a sus vehículos, "porque en Miami está de moda".

Según confirmó la policía bonaerense, Asci ya contaba con antecedentes en la venta de drogas sintéticas. En 2015 se le secuestraron 7091 pastillas con presencia de butilona y 236 pastillas con el dibujo de una "W" con presencia de xilocaína, cafeína, teofilina y fluoxetina. La policía lo encontró en una cocina de éxtasis en Olivos, y fue uno de los sospechosos que fue retirado esposado de una casa en Bermúdez al 2100, aunque se le dictó falta de mérito porque "las sustancias químicas que les fueron secuestradas en ese momento no estaban consideradas como estupefacientes".

Autos de alta gama, mansiones, yates, countries y viajes al exterior. En poco tiempo lograron obtener objetos inalcanzables, pero no habría sido por el esfuerzo como emprendedores, sino a partir de las ganancias obtenidas con la venta de drogas. Tras una investigación judicial, la policía bonaerense realizó ayer 30 allanamientos por todo el conurbano y consiguió desbaratar una organización narcocriminal, que comercializaba cocaína, LSD, cristal y éxtasis para vivir una vida de lujo en Nordelta. Además, la casa funcionaba como el centro de operaciones donde se trazaban todas las directivas de la banda. Se investiga, también, la participación de dos financieras para lavar el dinero.

"A diferencia de otras veces, hoy no estamos en un lugar humilde, vulnerable, como los que suelen utilizar muchos delincuentes para esconderse, sino que nos encontramos a escasa distancia de un barrio de lujo", dijo el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo.

Según fuentes judiciales y policiales, se lograron 16 detenciones. El procedimiento fue coordinado por efectivos de la delegación La Matanza de la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado, quienes secuestraron 6 kilos de cocaína, 4,5 kilos de marihuana, un kilo de cristal, 650 pastillas de éxtasis y 130 dosis de LSD. También se incautó una embarcación amarrada en el barrio Las Caletas de Nordelta y ocho vehículos, entre ellos: un BMW, camioneta Range Rover Evoque, Chrysler Pt Cruiser, Fiat 500, Ford Focus, Volkswagen Vento, Renault Kangoo y Peugeot 206.

De acuerdo con la investigación, la banda era liderada por Martín Asci, de 28 años, –quien en 2015 se le dictó falta de mérito en una causa por drogas- y Paula Avanzi, quienes alternaba domicilios entre Nordelta – donde pagaban 77.000 pesos de alquiler-, un country en Escobar y un barrio cerrado en El Remanso, en Exaltación de la Cruz. Desde del barrio cerrado organizaban todas las operaciones y dirigían la organización criminal que regentaba búnkeres de venta de droga en varios barrios del conurbano.

Según informaron los investigadores, la causa comenzó hace tres años cuando un informante anónimo le alcanzó a los investigadores bonaerenses la información donde funcionaban distintos puntos de narcomenudeo en el partido de San Martín y en José C. Paz. A partir de esos datos, los detectives iniciaron la pesquisa que terminó ayer con el arresto de los integrantes de todos los eslabones que eran parte de la organización. Desde los vendedores callejeros hasta sus líderes que vivían una vida de lujo en el country Nordelta, en Tigre.