Conmoción en Córdoba por el asesinato de un director de orquesta escocés
Finlay Ferguson, de 60 años, estaba a cargo de la Orquesta Académica Juvenil del Teatro Libertador. Hay detenido un mayor de edad.
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CORDOBA. Hay conmoción en los ámbitos artísticos y académicos de esta ciudad por el crimen del escocés Finlay Ferguson, de 60 años, director de la Orquesta Académica Juvenil del Teatro Libertador. Su cuerpo, desnudo, estaba en la cama de su departamento, con un golpe en la cabeza. Después del mediodía detuvieron a un mayor de edad.
El fiscal Rubén Caro, a cargo de la causa, especula con que el músico podría haber sido agredido con una pesa y que sería el golpe en la cabeza lo que le habría provocado la muerte. En el departamento faltan “algunos elementos personales y algo de dinero”; el detenido tenía esas cosas en un bolso.
Apenas conocido el hecho, los investigadores empezaron a buscar a un joven conocido de Ferguson sospechoso del crimen que se produjo el jueves a la tarde en el edificio de barrio Guemes. El muchacho fue encontrado en Santiago del Estero.

La Agencia Córdoba Cultura difundió un comunicado expresando el pesar por la muerte; cuenta Ferguson hace más de 30 años que estaba radicado en Córdoba, que “era su hogar”. Dirige la orquesta juvenil desde el 2005, cuando fue creada. Además de ese cargo, era reconocido como violinista.
Quién era Finlay Ferguson
Egresó de la Real Academia de Música de Escocia y la Hochschule für Musik (Colonia, Alemania) y recibió importantes premios, becas y distinciones, como la Medalla de Oro de la Real Academia de Música de Escocia, el premio Dunbar Gerber por sobresalientes interpretaciones de Beethoven y la Beca Mayor del Consejo de la Artes de Escocia.
El comunicado agrega hace poco el músico fue declarado socio honorario de la Asociación de Padres y Alumnos del Método Suzuki por “sus contribuciones a la formación de varias generaciones de jóvenes músicos en Córdoba".
La policía fue notificada ante la alarma de un alumno que anoche fue a tomar clases a la casa de Ferguson y, al no poder comunicarse, sospechó que algo podía haber pasado.






