Coronavirus en la Argentina: advertencia de la policía por una marcha en Tigre

La convocatoria a una caravana vehicular desde el complejo urbano de Villanueva hacia el centro de Tigre, en protesta por la prolongación de la fase dura de la cuarentena y sus consecuencias sobre la economía y la calidad de vida de las familias de ese grupo de barrios cerrados, fue objeto de una intimación policial que los habitantes tomaron como un amedrentamiento, a partir de la advertencia de que está "prohibido manifestarse".

En respuesta al anuncio de lo que en los flyers aparece como una "revolución pacífica en auto por nuestros derechos", el oficial a cargo del destacamento de Villa La Ñata envió a los encargados de los once barrios que integran Villanueva una nota en la que los insta a comunicar a "los propietarios y residentes del lugar" que por la vigencia del aislamiento social preventivo y obligatorio "queda terminantemente prohibido todo acto de manifestación".

Muchos vecinos del complejo se enteraron de la marcha recién cuando, desde la administración de cada barrio, recibieron en sus celulares el mensaje de WhatsApp que transmitía la "orden" firmada por el oficial inspector Lucas Gabriel Farías. Y no pocos de los que contactó LA NACION afirmaron que no tenían previsto participar de la caravana, pero que ahora piensan seriamente hacerlo porque sienten que aquel mensaje policial pone en peligro su derecho a la libertad de expresión.

Anoche, los organizadores de la marcha debatían una reconfiguración del recorrido -que incluía una escala en el barrio Santa Teresa, donde vive el intendente de Tigre, Julio Zamora-, aunque garantizaban que hoy, a las 18, saldrán con sus autos y con barbijos puestos para exigir que se respete su derecho a la circulación, al trabajo y a expresarse y manifestarse pacíficamente.

En el Ministerio de Seguridad bonaerense analizaban el conflicto generado en Tigre a partir de la intimación del destacamento. "Se está investigando qué sucedió y se iniciarán actuaciones administrativas", dijeron fuentes de la cartera que conduce Sergio Berni. No se informó si habrá algún tipo de operativo para seguir la caravana o si se instalará algún retén para evitar que avance hasta la municipalidad, como era la idea original de los organizadores.

Vecinos con los que dialogó LA NACION con la condición de no ser identificados, dijeron que la caravana surgió como un acompañamiento al cacerolazo convocado por redes sociales para esta tarde. A las consignas propuestas en el contexto de la protesta general -contra la impunidad y por la reactivación de las causas de corrupción, la reducción de gastos del Estado y el pleno funcionamiento presencial de la Justicia y el Congreso- les sumaron dos preocupaciones específicas: la necesidad de que se reactive el trabajo, para evitar el quebranto de miles de empresas, y las restricciones a la circulación peatonal dentro de Villanueva.

"Es inconstitucional que no se nos permita circular, ir a nuestros trabajos o movilizarnos. Hay que encontrar una forma, sin cancelar la cuarentena, de no volver atrás con la flexibilización; esto es insalubre. Con la excusa del Covid-19 nos estamos acercando a una dictadura", dijo una de las personas vinculadas con la difusión de la convocatoria.

"Nos llama la atención que haya otros barrios como el nuestro en Pilar o en Escobar que tienen permiso de desplazamiento y acá, en Tigre, no. Para poder ir a comprar a un negocio afuera debemos ir en auto porque se nos prohíbe ir caminando desde nuestras casas hasta la puerta del barrio. A eso se suma la imposibilidad de trabajo para muchas familias, dentro y fuera, en Dique Luján y en Benavídez", agregó.

Sobre la nota intimidatoria de la policía, otra vecina afirmó: "Tengo sentimientos encontrados; asombro, impotencia, desconcierto. Liberan a presos y nosotros recibimos estas amenazas por manifestarnos". Otra residente de Villanueva sentenció: "No tenía previsto marchar contra la cuarentena, pero ahora, con esto, me dan ganas de hacerlo, para defender la libertad de expresión".

Recordaron que un comité de representantes de los barrios envió una carta a los administradores de Villanueva y a la intendencia para que se les permita circular a pie dentro de sus barrios. Fuentes del gobierno de Tigre dijeron a LA NACION que "las medidas que tienen que ver con mayor o menor flexibilidad no las define el municipio, sino la provincia" y que en el corto plazo habrá una reunión entre "autoridades municipales y provinciales para avanzar sobre el tema". También dijeron que desde el municipio se respeta el derecho a la manifestación ciudadana, y que solo se espera que se respeten las cuestiones relativas al distanciamiento social, con el uso de barbijos.