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Un temporal arrasó viviendas y árboles en Santiago del Estero
Treinta personas resultaron heridas durante el tornado; hay 200 evacuados
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SANTIAGO DEL ESTERO.- Un tornado de 140 kilómetros por hora, que cruzó de sur a norte esta ciudad por una franja de dos kilómetros de ancho, junto con una copiosa lluvia de 90 milímetros y granizo que provocó la inundación de barrios periféricos, voladura de techos, cortes de cable de energía, la evacuación de personas y la asistencia de alrededor de 30 ciudadanos, tres de ellas en estado grave, en el Hospital Regional.
El fenómeno meteorológico se produjo alrededor de las 21.30 de anteayer, después de varias jornadas de agobiante calor y elevada humedad, acompañado de lluvias y tuvo una duración de 45 minutos.
El tornado arrasó todo cuanto fue medianamente débil ante su paso; principalmente, gran número de árboles que fueron arrancados de cuajo y al caer cortaron la circulación del tránsito en las principales arterias, especialmente las ubicadas en la zona sur.
La capital santiagueña se quedó entonces sin servicio de energía y agua, situación de la que se trataba de reponer lentamente durante la víspera.
Heridos
Varias personas fueron asistidas en el Hospital Regional por padecer quemaduras por electrocución.
En el barrio Ejército Argentino, una hombre fue alcanzado por un rayo y permanecía ayer en terapia intensiva en grave estado. Otras dos personas electrocutadas fueron internadas en estado reservado.
En los barrios La Católica y 8 de abril varias familias debieron ser evacuadas porque sus viviendas quedaron destruidas o anegadas tras el meteoro, mientras que el Río Dulce desbordó por una de las arterias de la zona.
El gobierno de la provincia dispuso que seis establecimientos escolares se habiliten para el alojamiento de los damnificados, que ascienden a 200.
En varias dependencias de la Gendarmería Nacional, que presta su colaboración en la emergencia, podrán refugiarse los evacuados.
Inundación en Chaco
El clima tampoco jugó limpio en el Chaco, donde las autoridades provinciales declararon otra vez el alerta ante una lluvia de 50 milímetros que cayó sobre Resistencia y provocó nuevas evacuaciones en sectores críticos de esa capital.
Si se producen precipitaciones en la cuenca de los ríos Paraná e Iguazú, en el Brasil, podría registrarse otra crecida de las aguas sobre las costas chaqueñas, fenómeno que ya obligó a evacuar y a autoevacuarse a 2000 personas.
Mar del Plata no resiste las lluvias
MAR DEL PLATA.- La lluvia caída en la tardes del martes evidenció las falencias que tiene esta ciudad para resistir un fenómeno climático que dejó a una gran cantidad de barrios bajo el agua.
Más de un centenar de familias tuvieron que ser evacuadas como consecuencia de las inundaciones.
Si bien las situaciones más graves golpearon áreas cercanas al puerto y barrios periféricos, el centro no quedó exento del avance del agua que ganó varios centímetros dentro de viviendas y locales.
Las pérdidas materiales fueron de consideración, máxime si se tiene en cuenta que las zonas más perjudicadas fueron las que albergan a los sectores más humildes.
Bajo el agua, sin techo
Varias familias quedaron en la calle y debieron resguárdase en el edificio de la Delegación Municipal del Puerto y el Hogar de Ancianos.
Créase o no, los equipos de rescate tuvieron como colaboradores a grupos de guardavidas que ayudaron en el rescate de los inundados.
"Parece mentira, pero mientras la municipalidad se preocupa por iluminar las playas, en los barrios seguimos enterrándonos en el barro y casi no ahogamos cuando caen dos gotas" se quejaba Nilda Sánchez, una vecina del sector más perjudicado con esta lluvia.
Tras una consulta popular, la ciudadanía marplatenses aceptó el año pasado pagar una tasa adicional de entre tres y cuatro pesos mensuales para financiar una plan de 25 obras denominado "Mar del Plata 2000" que lograría subsanar varios de los problemas que hoy permiten el pandemónium que genera cada lluvia de consideración.
"Quisiera que el intendente (Elio Aprile) vea cómo estamos y se embarre como cuando venía a buscar votos" se quejó Mirta Merlo, una vecina del barrio Las Avenidas.
Fueron casi sesenta milímetros de lluvia caídos en poco más de dos horas, suficientes para cambiar los sueños de ciudad del nuevo siglo por la pesadilla que representó ser por un día una burda y lamentable copia de Venecia, o por qué no, la versión real de la mítica Atlántida.
Por Darío Palavecino
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